PARIS, 16 de septiembre — Se avecina una huelga nacional de profesores - respaldada por el mayor sindicato de estudiantes de preparatoria y de la principal federación de padres - tanto en las escuelas públicas y privadas. Los sindicatos de docentes están pidiendo un paro de 24 horas el 27 de septiembre. Están exigiendo “el cese de los recortes de empleos, una lógica presupuestaria diferente”, y “una transformación democrática del sistema educativo para garantizar el éxito de todos los alumnos.”
Pero una huelga de un día no amenaza a los empresarios o al gobierno. Es una táctica utilizada por los falsos líderes sindicales para mantener el control y desviar la militancia de los trabajadores a un callejón sin salida.
Se redujeron más de 52.000 puestos de trabajo en educación en los últimos cuatro años. Otros 16.000 han sido despedidos este año escolar, y otros 14.000 están programados para salir en el 2012. Mientras tanto, la población estudiantil ha aumentado en 60.000 este año.
Este recorte de profesores ha repercutido en grupos más grandes, dificultad para encontrar sustitutos de profesores ausentes, eliminación de materias optativas y las asesorías individuales para alumnos.
En términos presupuestarios, los sueldos reales han sido congelados durante 16 años. Incluso según la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), “si se incluyen las horas extras y bonificaciones, el salario promedio de los maestros [en Francia] se mantiene por debajo de la media de la OCDE».
Una encuesta de opinión publicada ayer mostró que el 64% piensa que las escuelas “funcionan mal”, frente al 40% en 2007, el 60% dice que el sistema escolar no garantiza la igualdad de oportunidades.
De hecho, el 31% de los estudiantes universitarios son hijos de ejecutivos y de académicos altamente pagados (9% de la población activa). Por otro lado, el 12% provienen de familias de cuello blanco (16% de la población), y el 10% son hijos de obreros (13% de la población).
Privilegios de Clase y Racismo Van de la Mano en Capitalismo.
No puede ser de otra manera bajo el capitalismo. La educación en la sociedad capitalista está destinada a reproducir su dominación de clase. Los hijos de los ricos van a las mejores escuelas. Una minoría dotada obtiene becas. A todos los demás niños se les enseña lo suficiente como para mantener un empleo, el patriotismo para que sean leales a los patrones y el racismo para mantenerlos divididos. De hecho, un informe secreto del gobierno obtenido en agosto por el diario Le Monde dice que los insultos racistas y antisemitas, dirigidos tanto a profesores y alumnos, se están convirtiendo en actos cotidianos en las escuelas.
Salarios más altos y no a los recortes de empleo son reformas que pueden ser ganadas, pero la actual crisis económica y el clima social lo hace muy poco probable. Un hecho aislado como huelga de 24 horas sin duda no va a ganar estas demandas. Y no hay manera de que la clase gobernante permitirá “un sistema educativo democrático que garantice el éxito de todos los alumnos.”
Los sindicatos de profesores en Francia difícilmente enarbolarán demandas revolucionarias, con el objetivo de ganar a los maestros a darse cuenta de la necesidad de una transformación comunista revolucionaria de la sociedad. Solo promueven la ilusión de que sus demandas pueden ser satisfechas bajo el capitalismo, y de que están luchando seriamente para obtenerlas.
Los vendidos dirigentes sindicales está buscando aumentar su popularidad entre los maestros para las próximas elecciones del 13 al 20 octubre, para puestos en el consejo de administración laboral que ayuda a dirigir el sistema escolar. El resultado de las elecciones determinará la representación de cada sindicato, y por consiguiente, la financiación pública de puestos de trabajo de los dirigentes sindicales (Cada sindicato se reparte una cuota de horas pagadas durante las cuales sus representantes designados son liberados de sus deberes de enseñanza. No es de extrañarse, que los dirigentes sindicales están fuera de las aulas permanentemente, y se les paga tiempo completo para “hacer el trabajo sindical.”)
 
La huelga de maestros de un día es también una preparación para la otra huelga nacional de un día de los trabajadores de oficio, decretada para el 12 de octubre. Huelgas de un día y separados entre sí, es la receta de los vendidos para aparentar que actúan, evitando la posibilidad de una lucha unificada, garantizando al mismo tiempo que los trabajadores sigan siendo manejables. En realidad, ambas huelgas intentan movilizar a los trabajadores a votar por el Partido Socialista en la primera ronda de las elecciones presidenciales del 22 de abril de 2012.  A pesar de que durante la campaña de 2007 la candidata socialista Segolene Royale fue grabada en una reunión de puertas cerradas comprometiéndose a aumentar las horas de trabajo de los maestros.

Profesores comunistas necesitan llevar la política revolucionaria durante los preparativos y durante la huelga misma el 27 de septiembre. Denunciar las manipulaciones de los dirigentes sindicales corruptos y desenmascarando cómo la educación capitalista sirve para mantener el sistema de ganancias, así la huelga podría convertirse en una escuela de comunismo.