27 de Noviembre – Hammond, IN- Las manifestaciones en la universidad Perdue Calumet (PUC, siglas en inglés) contra el Profesor de Ciencias Políticas, Maurice Eisenstein, no dan señales de tregua.  Los estudiantes han estado haciendo campana activamente para forzar a la administración para que despida a Eisenstein y no han disminuido la presión.  
Las acciones de los estudiantes incluyen: circulación de peticiones, pedir a las víctimas de los ataques racistas y sexistas que pongan una queja formal, y organizar manifestaciones públicas además de un foro en el campus.  A pesar de la oposición derechista y de la apatía institucional, los estudiantes han dejado en claro que su demanda de despido no es negociable y que no retrocederán hasta lograr su objetivo.  
Desde que Eisenstein empezó a “enseñar” en PUC, ha usado sus clases como plataforma para diseminar su retórica extremadamente sionista e imperialista – argumentando nada  menos que la exterminación de los árabes y la colonización de sus tierras por israelitas y americanos.  Su posición sobre los eventos actuales ha ido más allá del imperialismo y terminando con una degradación odiosa de deshumanización de trabajadores migrantes árabes, negros, mujeres y minorías.  Su extremismo ha culminado en un ataque personal hacia los estudiantes y facultativos.  
A pesar de toda la evidencia que demuestra su incapacidad como profesor, la universidad ha sido apática y complaciente por casi dos décadas.  Solo después de las protestas de una coalición multirracial de estudiantes molestos, la universidad ha empezado a tomar las quejas seriamente.  Mientras tanto Eisenstein y un grupo pequeño de sus achichincles se han escondido detrás de la escusa derechista de “libertad de expresión” sin ver el abuso de poder como profesor y el potencial de consecuencias del adoctrinamiento racista.  
 Un grupo de PLPeistas han estado activamente involucrados en esta lucha desde su comienzo, trabajando con manifestantes con conciencia de clase y raza para inyectar el radicalismo necesario a esta lucha.  Mientras que algunos de los manifestantes quieren luchar dentro de los confines de la política universitaria, los PLPeistas y amigos se han asegurado que la lucha no sea diluida para encajar una agenda liberal más débil.
Nosotros en el PLP decimos que Eisenstein no es solamente un “chico malo” del quien la universidad se tiene que deshacer y automáticamente estará curada de racismo e intolerancia. Aun si Eisenstein es despedido, los PLPeistas piensan mantener la flama militante encendida en los estudiantes, ya que muchos de ellos enfrentan el racismo todos los días, debido a la propaganda imperialista.   Nuestra meta es construir solidaridad con los estudiantes que luchan contra la intolerancia y ayudarles a ver que el racismo solo podrá ser erradicado con la destrucción del sistema capitalista.  Sistema que necesita las ganancias, del diferencial de salario racista, para sobrevivir.  
Continuaremos trabajado con estudiantes y trabajadores que enfrentan intolerancia e intimidación racista similar.   Con un liderato solido comunista, estas pequeñas luchas pueden crear la energía y compromiso que se necesita para destruir al capitalismo de una vez por todas.