ISRAEL/PALESTINA, Enero — Hemos regresado del proyecto de invierno del Medio Oriente, con nuestras mentes y almas una vez más inquietadas del racismo, opresión y absurdez de las acciones del gobierno israelí. No solamente vimos los horrores de la ocupación militar de Palestina de 55 años, pero la discriminación entre los israelitas árabes y marco la distinción de clase entre los judíos. Aquellos que eran nuevos en el área estaban en un estado constante de shock e incredulidad a las situaciones con las que se toparon. Nos mantuvimos a flote, participando en luchas y haciendo amigos nuevos que estaban digiriendo nuestras ideas.     
Los israelís están continuando su ley de sacar a los palestinos demoliendo sus casas por miles o si no haciéndoles la vida miserable para que emigren. En el barrio del Este de Jerusalén, Sheikh Jarrah, las manifestaciones continuaron contra la toma de casas por los judíos, en las cuales palestinos han vivido por 60 años, que fueron sacados del Oeste de Jerusalén en 1948. Nos sentamos con una familia allí, mitad de los que les han ocupado las casas jóvenes israelís y sus perros, que atacan miembros de la familia. En otras dos áreas del Este de Jerusalén, visitamos pueblos donde la expansión israelí ha confiscado la tierra.
En el sur, en el Desierto de Néguev, los Beduinos que aceptaron ser ciudadanos en el ´48, viven en pueblos ´´no identificados´´ que no reciben servicios. Uno, El Araqib, lo han arrasado y reconstruido 33 veces desde julio del 2010 por que el gobierno, con el respaldo financiero de una organización americana cristiana fundamentalista, desea crear un bosque. Vimos como han derribado 500 casas y 4500 arboles de olivos creando un páramo. El resto de los residentes están viviendo en camiones y caravanas en su cementerio. Cada semana, los vecinos y activistas israelís se paran en una intersección ocupada con pancartas, tambores y discursos. Acogieron una discusión sobre la lucha contra el racismo por uno de nuestros visitantes.
En Tel Aviv, las ciudades de carpas y manifestaciones del verano para recibir mas servicios sociales y viviendas se fueron, ya que la mayoría de la gente involucrada son de la clase media y les falto análisis político. Sin embargo, en una área de clase obrera de Tel Aviv, Hatikvah, y en otros lugares alrededor del país, todavía quedan pequeños campamentos de aquellos que han perdido sus casas aunque la mayoría todavía trabajan. Marchamos en una manifestación militante de cientos de obreros y activistas en las cuales arrestaron a 43 personas. Nuestros camaradas participan regularmente en todas estas acciones y tienen una base fija de lectores y amigos.  
En Cisjordania, las condiciones continúan siendo vergonzosas. Los representantes de un grupo de apoyo para prisioneros describieron como pueden arrestar palestinos por pertenecer a partidos políticos, hasta el gobernante Fatah, sosteniendo una bandera, congregándose en un grupo de más de 10 personas, o haciendo cualquier declaración política. Vienen de cortes militares y pueden ser detenidos pare ser ´´investigados´´ indefinidamente, con tal que de que un oficial militar lo renueve cada 3 meses. Han encarcelado cuarenta porciento de todos los hombres palestinos en los últimos 50 años. Desde que liberaron 400 prisioneros en un intercambio muy publicitado  por solo un prisionero israelí Shalit, han arrestado un número igual. Usan tortura generalmente, hasta con niños. Los partidos palestinos gobernantes, Fatah y Hamas, también arrestan y abusan cientos de activistas palestinos.       
La vida en Territorios Ocupados continúa siendo constreñida por el muro y falta de trabajo, movilización, bienes, y cuidado de salud. En un campo de refugiados que visitamos, el desempleo es de 63% comparado al 30% del resto de Cisjordania. Los activistas con los que hablamos eran pesimistas sobre una erupción cercana de resistencia, ya que hacen falta exigencias o metas uniformes. Nuestras ideas, de la necesidad de una sociedad secular, multirracial, comunista eran atractivas para algunos, y renovamos la discusión con amigos que conocimos en visitas anteriores. El nacionalismo priva a muchos palestinos, el deseo de crear un estado palestino libre de opresión israelí, y muy listos para aliarse con los partidos locales gobernantes, Fatah y Hamas, aunque reconocen su corrupción y lazos con el imperialismo, los EU, y los jefes israelís.    
Cuando nos fuimos estábamos emocionados por los amigos y partidarios que dejamos y vimos nuestra oportunidad de influenciar muchos judíos y árabes con nuestra lucha de crear un partido de la clase obrera internacional anti-nacionalista. En los E.U., educaremos nuestra base sobre las condiciones aquí y trabajaremos con las organizaciones aquí que se oponen al apoyo masivo de $3 mil millones de dólares anuales del gobierno de los E.U. a Israel, que lo mantiene a flote. Israel, con su ejército poderoso y armas nucleares, sirve como policía de los E.U. en la región, para proteger los intereses de petróleo y sirven como aliado en empresas militares potenciales, como una invasión a Irán. Una lucha contra el imperialismo aquí es una parte esencial para luchar contra el fascismo en Israel.