BROOKLYN, 16 de Junio  – “¡Asistencia Medica Si, Wall Street, No, Cuomo [gobernador] Tiene que irse! fue la consigna que miembros y amigos del Partido Laboral Progresista voceaban, seguidos de cientos de trabajadores del hospital, en su mayoría mujeres.  Era la consigna que se gritaba durante toda la marcha contra los cierres de hospitales Downstate.  Muchos líderes sindicales y políticos se veían completamente incomodos.  Los discursos fueron militantes, en respuesta al ánimo de los trabajadores.
Por un año, trabajadores del hospital y de los barrios a quienes servimos han estado luchando contra los cierres y reducción de los hospitales Downstate y Long Island College (LICH, siglas en inglés).   Downstate está formado por 8,000 trabajadores y casi 2,000 estudiantes de medicina, es el cuarto negocio más grande de Brooklyn.   Los patrones de hospitales y del estado de NY han estado divagando en sus planes, en cierto modo, debido a la lucha.  En el ambiente de crisis actual, el gobernador Cuomo y los ministros de haciendo quieren recortar los salarios y beneficios; su plan no tiene ninguna solución para los hospitales que sirven a una gran porción de pacientes de Medicaid y no asegurados.  El experimento de Public Benefit Corporation de un “Plan Sostenible” propuesto por los patrones de Downstate, significa la imposición de más recortes.    Este es un despreciable ataque racista, sexista, contra la clase trabajadora local.  Ambos, políticos y líderes sindicales, temen que nuestra lucha progrese hacia acciones más militantes en vez de solo peticiones.  Cientos de DESAFIOS se vendieron en el hospital.
Al frente de la lucha están las trabajadoras, casi todas son negras o inmigrantes.  Considerando el hecho sexista de que las mujeres soportan casi toda, si es que no es toda, la responsabilidad de la crianza de los niños y del cuidado de sus pacientes,  estamos al frente de la lucha por la asistencia médica para nuestras familias.   Nosotros, quienes podemos perder nuestro empleo en estos hospitales, somos los principales proveedores de nuestros hogares.  A pesar del trabajo no remunerado en la casa y los sueldos de explotación en los hospitales, las trabajadoras se están involucrando y tomando el liderato, ¡muchas veces por primera vez!
El PLP ha estado involucrado en la organización de estas luchas del hospital.  Estuvimos ahí cuando los trabajadores del hospital Brookdale se enfrentaron a Medisys, al administración criminal del hospital.  Fuimos parte, junto a Occupy Wall Street, en la organización de la primera manifestación el pasado junio en Downstate. Hemos tratado de ayudar a movilizar a los residentes de los barrios Red Hook (sobrevivientes de la súper tormenta Sandy) en la lucha con los trabajadores y pacientes en LICH.  En todo esto hemos advertido que esta crisis en la salud es causada por la necesidad de los capitalistas de mover los recursos fuera de los servicios sociales y hacia sus esfuersos para mantener el control sobre su imperio mundial.  Los trabajadores en los hospitales debemos unirnos y pedir a los pacientes su apoyo.  NO podemos creer en el voto o los políticos.  La lucha militante masiva de bases es nuestra única oportunidad para revertir estos ataques.  Al final, siempre hemos dicho que un sistema basado en las ganancias nunca podrá proveer de un servicio de salud decente  para la clase trabajadora.  Es por eso que nosotros luchamos para construir un movimiento de masas comunista in esta lucha anti-sexista.