DACA, BANGLADESH, 28 de Septiembre — “No dudaremos en hacer lo que sea para lograr nuestras demandas…la economía se mueve con nuestro trabajo,” declaro Nazma Akter, una de las lideres de las casi 200,000 trabajadoras en huelga en cientos de fabricas de costura que demandan se triplique su sueldo mensual de $38 a $104. (Reuters, 23/09) Como queriendo darle peso a sus declaraciones, trabajadores de diez fábricas en la ciudad de Savar atacaron una base militar, llevándose rifles y municiones e hiriendo a cinco guardias para militares. (Noticias ACA, 22/09)
“Hemos demandado un salario mínimo de $100,” dijo una huelguista a la Agency France Press (23/09).  “Un trabajador necesita mucho mas que eso para tener una vida decente.”
El levantamiento, ahora en su sexto día, ha mostrado a trabajadores airados peleando con la policía en las calles, 10,000 bloqueando  carreteras principales en y alrededor de esta ciudad capital, incendiando bodegas, atacando fabricas que permanecen abiertas.  Cuando la policía les disparo con balas de goma y gas, ellas respondieron lanzándole ladrillos a la policía.  Según la ultima cuenta, 70 trabajadoras y ocho policías han sido heridos durante los enfrentamientos.  
Los patrones son quienes están en el centro del problema: Por la búsqueda de obtener el máximo de  ganancias de su capital.  La Press Trust de India (p/26) reporto que dijeron: “Grandes aumentos [de sueldo] podrían corroer la ventaja de Bangladesh como una fuente de mano de obra barata comparada con otros países exportadores de ropa como India, China y Vietnam.” The Associated Press (25/09) describió que “las marcas globales no están dispuestas a pagar precios altos en medio de la violenta competencia.”  Es decir, los patrones en competencia en una “carrera hasta el fondo.” Los patrones explotadores de la costura en Bangladesh reciben $20 mil millones de sus exportaciones a EEUU y Europa, distribuyendo a multimillonarias compañías como Wal-Mart, GAP, Sears y Target.  
La “Paz Industrial” de patrones contra la lucha de Clases de los trabajadores
Los patrones están  nerviosos ya que la militancia de los trabajadores ha puesto al descubierto la explotación racista del sistema de ganancias en este país, antigua colonia.  Es por eso que el New York Times, vocero principal de la clase dominante, le dedico un editorial (26/09) a una demanda de aumento de salario y mejores condiciones.  Decía que los patrones y gobierno de Bangladesh, y las compañías occidentales que hacen ganancias de estos bajos  salarios y peligrosas condiciones laborales,  “todas tienen una inversión en la paz industrial.”  Tienen miedo que sin esa paz esto podría ser tierra fértil para la guerra de clases bajo el liderato comunista que estaría organizando una revolución para la derrota del capitalismo, el cual paga estos salarios indecentes mientras que gana miles de millones de la mano de obra de los trabajadores.  
En una sociedad comunista, dirigida por y para nuestra clase, no habrá patrones o ganancias del sexismo ni del racismo.  Tampoco habrá trampas mortales como el de la fábrica Rana Plaza el pasado abril donde murieron 1,132 trabajadoras.  La clase obrera actuara de cada quien según su compromiso y decidirá colectivamente lo que nosotros produciremos y distribuiremos según la necesidad.   
Ahora los patrones han ofrecido un aumento del 20%  es decir a ¡$45 al mes! Los trabajadores han contestado “es inhumano y humillante.”  Así que después de “promesas” de un aumento en noviembre, los trabajadores dijeron que terminaran la huelga en cinco días.  Pero el sexto día los trabajadores  los trabajadores siguen en las calles de Savar y Navayangan, ciudades en donde han cerrado 300 fabricas mientras que el  gobierno desplaza tropas en el distrito industrial de Gazipier.  
Los trabajadores en Bangladesh, especialmente las trabajadoras de la costura, dan un gran ejemplo a la clase trabajadora internacional.  Sus acciones nos dicen que la guerra de clases contra los patrones es el camino a seguir.  Nuestro señalador deberá decir, “¡Avanza al Comunismo!”