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¡MARCHA EN DILLEY PARA APLASTAR EL RACISMO ANTI IMMIGRANTE!

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23 Abril 2015 87 visitas

TEXAS – En diciembre del 2014, el gobierno racista de Obama abrió una nueva cárcel en Dilley, Texas para encarcelar a miles mujeres y niños inmigrantes que han estado entrando a los EEUU desde el verano pasado. Esta nueva cárcel era necesaria porque los abogados de ICE de Obama alegan que las mujeres representan una “amenaza a la Seguridad Nacional de EEUU” debido a su inmigración masiva. Por lo tanto se les mantenía detenidas sin derecho a fianza, inclusive si tenían la posibilidad de solicitar asilo por causa de persecución en su país de origen.
El gobierno de EEUU tiene un profundo miedo racista de los trabajadores Latinos y negros, que tienen el potencial de liderar una nueva ola de luchas. Casi todas estas mujeres y niños están huyendo de la violencia, especialmente de los ataques y asesinatos sexistas en Honduras, Guatemala y El Salvador.
 Los patrones de EEUU le temen a la Rebelión
El gobierno de EEUU sabe que los detenidos en la cárcel de Dilley y sus familiares en el resto de EEUU y en sus países representan una amenaza de rebelión contra el capitalismo. El acto mismo de cruzar la frontera es un acto de rebelión. Esto se debe a que estas familias son parte de la sección mas explotada de la población mundial y son las que tienen más probabilidades de luchar enconadamente durante sus vidas. La situación es la misma para las familias negras de clase trabajadora en los EEUU, que de manera creciente son las víctimas de los asesinatos policiales en las calles y que tienen los más altos índices de arrestos y detenciones.
El racismo es una estrategia para dividir a la clase trabajadora que beneficia sólo a los ricos, porque la súper explotación de diferentes sectores de la clase trabajadora garantiza que los salarios y condiciones de toda la clase trabajadora se mantenga baja y se reduzca aun más.
En los EEUU a cada grupo se le adoctrina para que acepte que empeoren las condiciones de los otros. Al mantener los salarios y las condiciones horribles para los negros, Latinos y otras minorias, el sistema mantiene a millones de trabajadores por debajo del nivel de “pobreza”. El racismo afecta a toda la clase trabajadora. Permite que el salario y las condiciones de los trabajadores blancos y el de los ciudadanos se reduzcan, y es razón por la cual el patrón de vida en los EEUU empeora todos los años, excepto para los más ricos. ¡El racismo es la clave para el lucro capitalista!         
El aumento de la Rivalidad lleva a la Guerra Imperialista
La clase capitalista estadounidense apoya estos gobiernos para garantizar la continuidad de la dominación imperialista de EEUU en Sud América, en la que estos países son fuente de lucro y de recursos. En estos países, como en el Medio Oriente, el imperialismo estadounidense debe oponerse a la inversión y a la expansión de la influencia europea, china y rusa. Los EEUU recientemente ayudaron a que el actual gobierno de Honduras reprimiera un movimiento alineado con Venezuela, que está en la órbita del imperialismo ruso.
Actualmente, los líderes de los EEUU, Europa, Rusia y China están intensificando la competencia imperialista entre ellos por las riquezas del planeta. En la medida que el gobierno de EEUU se prepara para guerras más extensas con sus rivales imperialistas, necesita fortificar el miedo racista hacia los inmigrantes a lo largo de la frontera sur.
Dilley es parte de los esfuerzos del gobierno para promover el nacionalismo, así como para convencer a los ciudadanos que los extranjeros quieren robarles los trabajos. Esta fue la base de la ideología fascista de Hitler en los años 30, que alegaba que los judíos les robaban los trabajos y propiedades a los no judíos. Esto paso de retorica a campos de concentración y a exterminio masivo.
Dilley, y la intensificación del racismo en la frontera hoy, es la vanguardia del fascismo en los EEUU del siglo XXI. Desde el 2000, el número de agentes de control fronterizo se ha duplicado a 18,0000 y la extensión de las alambradas se ha multiplicado nueve veces hasta las 700 millas. Los teledirigidos ahora patrullan unas 900 millas en la frontera, con más de 10,000 vuelos en los últimos dos años. Esto, junto con los ataques a los inmigrantes por parte de las milicias fronterizas como los Minuteman, promovidos por el gobierno, demuestran la capacidad del capitalismo para usar las herramientas fascistas del estado para perpetuar el terror racista a escala masiva.       
El “Deportador en Jefe” Obama ha deportado a más personas que cualquier otro presidente – 2.4 millones de inmigrantes desde que asumió el poder – y separo a muchos más. Ahora esta encarcelando a miles en Dilley. Ahora, como en la Alemania de los años 30, los liberales preparan el camino al fascismo.
  ¡Marchemos el Primero de Mayo!
Muchos ahora ven las elecciones presidenciales del 2016 como una esperanza. En los EEUU, todos los payasos en el circo político son enemigos de la clase trabajadora, ya sean socialistas, liberales o conservadores. Las deportaciones y encarcelamientos masivos de trabajadores negros y Latinos no son consecuencia de un sistema de inmigración “roto”.
Es producto de un sistema capitalista racista, un sistema que depende de la súper explotación racista para sobrevivir. El capitalismo no se puede reformar. Los patrones de EEUU van a depender de estos trabajadores inmigrantes como carne de canon en las guerras imperialistas más grandes y mortales que ya se asoman en el horizonte.
Muchas iglesias y grupos activistas están organizando marchas para demandar la liberación de los encarcelados, y el Partido Laboral Progresista va a marchar con ellos. El PLP lucha por algo más. En el pasado, los trabajadores y campesinos rusos y chinos, liderados por comunistas, derrotaron al capitalismo y gobernaron la sociedad, llegando a derrotar al fascismo alemán y japonés.
Hoy, aprendiendo de las victorias y fracasos pasados y con el liderazgo comunista del Partido Laboral Progresista, podemos forjar un masivo Ejército Rojo de la clase trabajadora que no sólo arrasará con la cárcel de Dilley, sino que destruirá el sistema capitalista con la revolución comunista. ¡MARCHEMOS A LA PRISION DILLEY EL 2 DE MAYO, 2015!