Los vendedores ambulantes protestan contra el acoso racista
Estuvimos en una marcha de protesta de una coalición a favor de los vendedores ambulantes. Fue una manifestación pacífica, pero EXIGENTE, para que la ciudad aumente el número de licencias para estos trabajadores. Estos obreros a diario son acosados y perseguidos por la policía, con numerosas multas, que tienen que ellos pagar. Esto hace la vida más difícil a estas personas ya que la mayoría son indocumentados que dependen de lo que pueden ganar de sus ventas diarias para poder sobrevivir en una ciudad donde cada vez la vida se pone más cara e imposible para la clase obrera. La vida es mas difícil en especial para los inmigrantes indocumentados, que son víctimas del acoso y el racismo.

Dos PLPelistas, que estamos haciendo el trabajo dentro de una organización comunitaria de la coalición, dimos liderato en varias ocasiones durante la marcha, gritando nuestras consignas, poniendo adelante la línea de nuestro Partido y en un punto de la marcha, de forma muy rápida colocamos una manta grande con las demandas en una oficina del gobierno. También distribuimos varios Desafíos que fueron tomados con mucho entusiasmo por las personas que conocen nuestro periódico. Fue una jornada de lucha militante, pero solo el comunismo salvará a toda nuestra clase trabajadora de las atrocidades del capitalismo.

******
Dos funerales y una revolución
El 24 de septiembre, DESAFÍO publicó un editorial sobre la muerte de la reina Isabel II. El artículo hizo un excelente trabajo al yuxtaponer la pompa que rodeó el funeral patrocinado por el estado de Isabel con la miseria y destrucción que el Imperio Británico de su familia provocó durante sus años de apogeo. Pero, la muerte de Isabel simboliza algo más para los trabajadores del mundo. Su muerte, que se produjo mucho después de la muerte de la monarquía y el feudalismo, debería recordarnos que hubo un tiempo en que los campesinos no podían imaginar el fin de reyes y reinas. De hecho, la monarquía inglesa ha existido (y de hecho gobernó) durante más de mil años y la monarquía y el feudalismo han existido desde antes de la historia registrada. Isabel fue, durante toda su vida, nada más que una figura decorativa, una mascota nostálgica exhibida por los capitalistas cientos de años después de que ellos mismos terminaron violentamente con el gobierno de reyes y reinas. El capitalismo como sistema económico aún es mucho más joven que el feudalismo cuando el capitalismo lo derrocó y, sin embargo, muchos asegurarán con confianza a los trabajadores que el capitalismo es el mejor sistema posible. Ese comunismo, una idea de apenas ciento cincuenta años, ha tenido su día en el sol yendo y viniendo.

En realidad, la Unión Soviética, la Revolución China y las demás victorias obreras de la historia son solo el presagio de un mundo comunista dirigido por los trabajadores. Ya sea en los próximos cien o quinientos años, las contradicciones del capitalismo conducirán a que la clase verdaderamente productiva, los trabajadores, tomen el control, al igual que los capitalistas tomaron el control de manos de la reina Isabel y sus predecesores hace tantos años. El fallecimiento de Elizabeth debería recordarnos: habrá un día en que los trabajadores vean un titular que conmemore al último capitalista vivo del mundo sucumbiendo a la vejez, y ese día sacudiremos la cabeza y diremos “adiós”.

******
Deseando compartir la visión del comunismo
El libro de Edward Bellamy, Mirando hacia atrás, podría haberse titulado “Mirando hacia adelante”. La primera revisión del DESAFÍO me motivó a ir a la biblioteca. Aplaudí el trabajo obligatorio de Bellamy para las personas de 21 a 45 años, incluidas las personas con problemas físicos o mentales. Se distribuyen tarjetas de crédito iguales para necesidades y “lujos”.

Más tarde, al leer la segunda reseña, agradecí señalar las debilidades de Bellamy: lograr una sociedad así de manera pacífica, omitiendo los temas racistas y viendo a las mujeres de manera sexista.

Sin embargo, me doy cuenta de que habla de las necesidades humanas: 1) El trabajo es una necesidad y se puede crear para aquellos con habilidades “menores” para desarrollar todo su potencial. La amenaza del desempleo y el cinismo de la competencia despiadada están ausentes. 2) La gente se da cuenta de los beneficios de su trabajo cuando se elimina el desperdicio capitalista: es decir, el exceso de oferta y la duplicación de productos de marca. Me regocijé cuando Bellamy eliminó el monstruoso presupuesto militar, los políticos y el sistema judicial.

Muchas personas a las que me acerco hoy con nuestro artículo están de acuerdo en que el capitalismo es violento y solo se puede combatir con violencia. Pero las preguntas que escucho a menudo son: “¿Cómo motivará a las personas a luchar por estos valores? ¿Cómo se puede tener una sociedad sin dinero?

Debo recordarme a mí mismo involucrar más a la gente en torno a una visión de un futuro comunista. Al lograr un estatus popular en el pasado, el libro de Bellamy abordó el hambre universal por estas ideas.

Dicho esto, ¡vale la pena luchar por construir una sociedad con trabajo productivo y personas que reciban los frutos de su trabajo!

Respuesta al DESAFÍO:
La eugenesia racista de Bellamy y sus repugnantes ideas anticomunistas, fascistas y sexistas superan cualquiera de sus ideas positivas anticapitalistas. La construcción de una sociedad comunista requiere la lucha para erradicar estas ideas y prácticas.
*****