En Gaza, mientras los trabajadores y los niños luchan desesperadamente por sobrevivir, nuestros hermanos de clase en todo el mundo luchan por el fin del genocidio imperialista israelí y estadounidense. La ayuda estadounidense a Israel pagó gran parte de las 12.000 toneladas de bombas que han impactado en una franja de tierra densamente poblada del tamaño de Filadelfia ( MEMO, 25/10/23 ). Al 29 de octubre, el número de muertos por este bombardeo criminal e indiscriminado ascendía a más de ocho mil personas, casi la mitad de ellos niños (apnews.com, 29/10). Cientos más mueren cada día.

La ira de los trabajadores ha llenado las calles desde Ciudad del Cabo hasta Dublín, desde Caracas hasta la ciudad de Nueva York, desde Estambul hasta Kuala Lumpur. Su ira está impulsada por las atrocidades cometidas por el ejército de Israel, que ha convertido una prisión al aire libre en un campo de exterminio. Mientras Palestina-Israel está plagada de líderes engañosos, desde Netanyahu hasta Hamás, los trabajadores del mundo, y especialmente los de Gaza, muestran el potencial revolucionario que necesitamos para construir un futuro comunista internacionalista liderado por el Partido Laboral Progresista (PLP).

En las guerras imperialistas, los trabajadores mueren y sólo los patrones ganan. Necesitamos una clase trabajadora internacional, un mundo y un partido para aplastar a los patrones que son la causa fundamental de estos conflictos, desde Palestina/Israel hasta Ucrania y Yemen. Es tarea de cada lector del DESAFIO construir el PLP para hacer avanzar la conciencia de clase y poner fin a la guerra imperialista con una revolución comunista internacionalista. Luchar por el comunismo significa abolir el nacionalismo y el racismo porque llevan a los trabajadores al mismo camino mortal trazado por Israel y Hamás. Si bien los líderes capitalistas de Israel tienen mucha más sangre en sus manos, ambos grupos de gobernantes utilizan la religión y el nacionalismo para engañar a los trabajadores hacia su perdición. La idea de naciones, razas y etnias separadas y en guerra proviene de las mentes enfermas de los patrones multimillonarios. Serán abolidos cuando los trabajadores del mundo se unan para aplastar de una vez por todas el sangriento sistema de ganancias.

Los trabajadores salvan a los trabajadores
Los trabajadores esenciales en Gaza están mostrando a nuestra clase en tiempo real cómo puede ser el comunismo, incluso bajo asedio. Los trabajadores de rescate y los voluntarios están rescatando colectivamente a niños y familias de debajo de los escombros de las bombas de Israel. Otros continúan trabajando en tiendas de comestibles y panaderías mientras los edificios a su alrededor se caen y aplastan a sus vecinos.

Los trabajadores de la salud en Palestina han pasado días sin dormir mientras luchan por cuidar a nuestros hermanos de clase. El 21 de octubre, los trabajadores médicos del hospital Al-Shifa atendían a 3.000 heridos en unas instalaciones con camas para 700 (Médicos Sin Fronteras, DWB). Los trabajadores médicos realizan operaciones en los pasillos, frente a familiares, con poca o ninguna sedación o analgésicos. (Médicos Sin Fronteras, 24/10).

Curitas reformistas y bandidos capitalistas
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a quien se opusieron masas de trabajadores israelíes hasta poco antes de la masacre del 7 de octubre por parte de Hamás, utiliza el racismo antiárabe y una política de identidad tóxica para dividir judíos de trabajadores árabes y musulmanes. (Más de dos millones de trabajadores árabes viven en Israel.) La ideología sionista de la clase dominante israelí se basa en la idea racista de la supremacía judía para justificar un “Estado judío” –no importa cuántos trabajadores palestinos deban ser degradados, explotados o masacrado para sostenerlo.

La clave para resolver este conflicto reside en la unidad multirracial y la solidaridad de la clase trabajadora. En Estados Unidos, cientos de trabajadores árabes, judíos, asiáticos, latinos, negros y blancos realizaron sentadas en el Capitolio de Washington para exigir un alto el fuego y el fin de la matanza. Pero los miembros del Congreso de Estados Unidos, incluidos demócratas de falsa izquierda como Bernie Sander y Alexandria Ocasio-Cortez, han seguido al imperialista en jefe Joe Biden para apoyar aún más fondos para el genocidio israelí. Cuando se le preguntó sobre el implacable castigo colectivo de Israel a la población de Gaza, Biden reconoció cruelmente que “se ha matado a inocentes y es el precio de librar una guerra” (Reuters, 25/10).

Ante tal engaño mortal, los trabajadores deben denunciar a los patrones sionistas racistas en conversaciones con sus compañeros de trabajo. Los profesores deben luchar con sus alumnos para rechazar el racismo antimusulmán... y también el racismo antijudío. Todos debemos salir a las calles para compartir nuestras ideas internacionalistas, antiimperialistas y comunistas, y negarnos a dejar que estos asesinos nacionalistas, tanto demócratas como republicanos, se salgan con la suya. Así es como forjaremos un futuro mejor.

Sólo los patrones ganan cuando los trabajadores se pelean
Incluso antes de la última invasión israelí de Gaza, Estados Unidos estaba canalizando 3.000 millones de dólares al año al ejército de Israel. El Departamento de Defensa de Estados Unidos también tiene armas y bombas por valor de 2.000 millones de dólares a disposición de Israel para tiempos de crisis. La máquina asesina de Israel se aceleró después del ataque de Hamas del 7 de octubre contra Israel que mató a más de 1.400 personas, la gran mayoría de ellas civiles, incluidas docenas de beduinos árabes (NYT, 8/10/).
Hamás y otros nacionalistas palestinos sólo ofrecen muerte y destrucción a los trabajadores de Gaza. Pero por muy malo que pueda ser Hamás, seamos claros: la sangre sobre los escombros de Gaza es principalmente culpa de los patrones israelíes y sus patrocinadores imperialistas estadounidenses.

Las raíces del genocidio
El origen de la ocupación israelí de la tierra anteriormente llamada Palestina (por los imperialistas británicos y franceses) se remonta a principios del siglo XX. El desarrollo de identidades nacionales distintas entre los trabajadores árabes y judíos, junto con el surgimiento del movimiento nacionalista sionista, sentó las bases del Estado de Israel. Pero el país fundado en 1948 nunca se habría establecido sin el deseo de los imperialistas estadounidenses de contar con un organismo de control confiable para contrarrestar la influencia soviética en la región rica en petróleo.

Una vez que los patrones estadounidenses apoyaron con toda su fuerza un “Estado judío”, el escenario quedó preparado para el desplazamiento genocida masivo de los trabajadores palestinos. Tres guerras –la Guerra Árabe-Israelí (1947-1949), la Guerra de los Seis Días (1967) y la Guerra de Yom Kippur (1973)– mataron a miles de trabajadores y alimentaron movimientos racistas liderados por patrones de ambos lados. Hoy, sin una alternativa comunista, los trabajadores de Gaza no tienen adónde acudir más que el callejón sin salida del nacionalismo y las garras despiadadas de grupos como Hamás.

El nacionalismo es un callejón sin salida; ¡Lucha por el comunismo!
En la frontera con Palestina se encuentra Egipto, un país dirigido por un grupo de capitalistas menores notoriamente corruptos. Aunque alguna vez se aliaron con los nacionalistas palestinos, los patrones de Egipto ahora están matando de hambre a los trabajadores en Palestina y bloqueándoles el escape del bombardeo israelí ( Foreign Affairs, 25/10 ). Egipto está demorando hasta que puedan llegar a un acuerdo interesado con Israel. Esto es nada menos que un asesinato a sangre fría. ¡La vida de los trabajadores no puede esperar!

Para estar en condiciones de poner fin a estos baños de sangre imperialistas, el Partido Laboral Progresista debe crecer. Los miembros y amigos deben construir una respuesta internacionalista con urgencia. A medida que Estados Unidos, China y Rusia avanzan hacia el fascismo abierto y la guerra mundial, la violencia de hoy en Gaza y Ucrania podría ser la conflagración mundial del mañana. Cualquier lugar donde reine el imperialismo es un posible foco de guerra. Es hora de convertir la guerra patronal en guerra de clases. ¡Tenemos un mundo comunista que ganar !

El recrudecimiento de la falsa propaganda que los gobernantes y empresarios venden a la clase obrera mundial, es síntoma de la descomposición del capitalismo y de la agudización de las contradicciones entre clases. El aumento de la violencia y explotación en donde los opresores se valen de diferentes prácticas y engaños para controlar las masas de trabajadores en el campo y la ciudad, se evidencia en el fortalecimiento del corrupto sistema electoral, estando trabajadores y estudiantes dispuestos a “elegir” a sus explotadores quienes los reprimirán bajo la falacia de la democracia representativa.

Politiqueros de los distintos niveles, como: gobernadores, alcaldes, concejales y ediles aspiran en este momento en Colombia al botín burocrático y al control de las superganancias derivadas de la explotación de recursos naturales y mano de obra del proletariado cada vez más pauperizado. Todos los partidos electoreros más que soluciones y propuestas basan sus campañas en mentiras, atacando y menospreciando a quien no los siga y sacando a la luz pública los malos manejos de erario público, antecedentes delincuenciales de sus contrincantes y violación de la constitución burguesa que liberales, conservadores y socialdemócratas han promulgado y jurado cumplir.

El capitalismo que basa su desarrollo en leyes de la ganancia, termina eligiendo a sus dirigentes continuistas del monopolio financiero y beneficiando la clase explotadora, apoyados por el paramilitarismo y las mafias del narcotráfico. La socialdemocracia que lucha por un mejor capitalismo con tintes más humanos sucumbe ante el poder de la politiquería tradicional disfrazada de “nuevo cambio”, mientras los trabajadores continuamos perdiendo al apoyar uno u otro partido patronal siendo imposible la liberación de nuestro yugo bajo el capitalismo. Solo la destrucción del sistema salarial y su estado racista a través de la revolución comunista le permitirá a la clase trabajadora librarse de la opresión, nacionalismo, racismo, sexismo y cruentas guerras imperialistas patronales.

El capitalismo necesita el circo electoral para hacernos creer que votar ayudará a reformar el sistema de ganancias, atendiendo las necesidades de los trabajadores, razón por la cual los patrones buscan encontrar candidatos populistas que puedan desviar y pacificar a miles de trabajadores y estudiantes que están escépticos de la viabilidad del sistema debido a la impopularidad de la democracia burguesa, cansados por tanta violencia mercenaria perpetuada durante los gobiernos de Uribe, Duque y Santos y por el incumplimiento continuo y los fracasos de mandatarios como Petro y Claudia López.

Los trabajadores no podemos seguir creyendo en las mentiras de ninguno de estos bandos mafiosos, pues buscan alcanzar un gran acuerdo nacional, fortaleciendo las corruptas instituciones burguesas diseñadas para seguir gobernando, desarmando y controlando la ira de la clase obrera. Durante las marchas a favor y en contra de las reformas planteadas por el pacto histórico que se ha autodenominado como “el gobierno del cambio”, nuestro trabajo se concentra en hablar con allegados y amigos en calles, universidades y empresas sobre la trampa y promesas de estos reformistas que plantean un gobierno de colaboración de clases, maquillando el capitalismo con el fin de alejarnos de la lucha revolucionaria.

Asistimos a plantones, foros y mítines, compartiendo nuestro periódico Desafío, denunciando la corrupta farsa electoral y aclarando que nuestros enemigos de clase no serán derrotados mediante el voto, pues solo la organización en torno a nuestro partido podrá demolerlos con la lucha revolucionaria de masas, abanderada por la dictadura y el internacionalismo proletario.

Por esto reiteramos nuestro incesante llamado a no votar, organizándonos en torno al “PLP” y su línea revolucionaria comunista, combatiendo continuamente junto a nuestros hermanos de clase ya que tenemos el potencial cuantitativo e histórico para dirigir a nuestra sociedad; por esta razón, luchamos para ganar más proletarios a la necesidad de destruir este sistema guerrerista, responsable del desempleo, miseria, mala salud,crisis ambiental y violencia generalizada que sufrimos a diario.

Desde Israel: el apartheid mata a los palestinos y la conciencia de clase
La matanza es obra de los patrones. Quienes argumentan que estamos “asumiendo simetría entre el ocupante y el ocupado” no entienden el punto. No hay simetría entre los grandes patrones –chinos y estadounidenses– y las clases trabajadoras explotadas de Medio Oriente. Para ellos, todos somos esclavos de quienes extraer ganancias y piezas de ajedrez en sus luchas por el dominio geopolítico. El trabajador israelí no es el opresor del trabajador palestino; más bien, los grandes empresarios oprimen a ambos.

La clase dominante súper rica de Israel incluye a personas como Miriam Adelson, la trigésima persona más rica del mundo, con un patrimonio neto de 27.500 millones de dólares. Este jefe está muy involucrado en la política israelí y es un firme partidario del corrupto y fascista primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu. Por otro lado, Ismail Haniyeh, líder de Hamas –que se considera un “movimiento de resistencia popular”– vive seguro y lujoso en Qatar, lejos de Gaza. Tiene un patrimonio neto de 4 mil millones de dólares, obtenido extorsionando a la población de Gaza y malversando la ayuda extranjera entregada a la empobrecida Franja de Gaza. Mientras tanto, el 65% de la población de Gaza vive por debajo del umbral de pobreza.

Los grandes empresarios se salen con la suya con sus espantosos crímenes gracias a la ideología tóxica del nacionalismo. Esta forma de pensar postula que los trabajadores israelíes están del mismo lado que la multimillonaria señora Adelson, y que los trabajadores palestinos oprimidos están del mismo lado que el ultrarico señor Haniyeh. Pero los máximos patrones son enemigos absolutos de toda la clase trabajadora. Para ellos, nosotros, los trabajadores, no somos más que máquinas y herramientas para generar sus ganancias y librar sus guerras.

Si hay israelíes que se oponen a este genocidio, no los he conocido.

La acción de Chamas del sábado pasado ayudó a unificar todos los sectores de la vida aquí y las manifestaciones liberales contra la llamada “reforma judicial” desaparecieron y fueron borradas de la tierra.
Gal Gadot (la actriz israelí Wonder Woman) tuiteó diciendo que se opone al asesinato de judíos inocentes y que los palestinos fueron etiquetados como “traidores” por mencionar a palestinos y judíos en la misma oración. Eliminó su tuit y se disculpó.

La llamada “izquierda” etiqueta a los palestinos como “bestias humanas” y pide borrar a Ghaza del mapa. Nos quedamos en casa la mayor parte del tiempo; no hay escuelas (cerradas) y hay cohetes esporádicos dirigidos al área de Tel Aviv, por lo que tenemos que poder ingresar a un lugar seguro; las sirenas te dan 90 segundos para hacerlo.

El ejército está ahora comprometido en tres frentes y la matanza de palestinos continúa en el norte, Cisjordania y Ghazza bajo justificación “moral”.

Desafortunadamente, no existe un liderazgo comunista entre palestinos e israelíes, sólo motivación nacionalista y religiosa. El interés de toda la clase trabajadora en Israel-Palestina es echarle la culpa a sus verdaderos opresores y carniceros: la burguesía. La única manera de desechar la ideología venenosa del nacionalismo y reemplazar la guerra nacionalista por la guerra de clases es organizar un partido comunista multiétnico de masas. De esta manera, nosotros, la clase trabajadora, podemos ganar un mundo libre del círculo vicioso de la matanza. ¡Lo único que merece morir es el sistema capitalista!
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NY: en solidaridad con los huelguistas del UAW
Recientemente visité un piquete del United Auto Workers (UAW) con algunos compañeros sindicales para ver de primera mano la determinación y la valentía de los compañeros trabajadores mientras se involucran en su lucha contra los patrones. Después de parar en la tienda de comestibles para recoger algunos suministros de comestibles solidarios llegamos al piquete.

Los trabajadores eran de un pequeño proveedor de repuestos, pero quedamos impresionados con la solidaridad multirracial y entre géneros y su fuerza: ¡el piquete está activo las 24 horas del día, los 7 días de la semana!

Mientras estuvimos allí, escuchamos historias de trabajadores veteranos sobre cómo se vieron obligados a hacer concesiones para rescatar a las empresas automotrices durante la Gran Recesión de 2008 y cómo las empresas automotrices nunca cumplieron su promesa de restablecer los recortes. Jefes típicos. Estamos comprometidos en nuestra propia lucha por los contratos, y mientras nuestros líderes sindicales hacen todo lo posible para sofocar cualquier impulso hacia la huelga, los trabajadores están cada vez más hartos y listos para tomar medidas. Podemos inspirarnos en los trabajadores del UAW y su lucha continua.
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Haití: una revolución comunista es su única salvación
El 2 de octubre, el Consejo de Seguridad de la ONU votó una resolución que aprobaba el despliegue de una fuerza de 1.000 policías kenianos en Haití. Su principal objetivo declarado es combatir la proliferación de pandillas en la capital, Puerto Príncipe. Esas pandillas (en realidad milicias armadas) son el resultado de décadas de explotación impuesta por patrones locales e internacionales. La falta de una organización comunista importante dejó a los trabajadores desempleados sin otra opción que unirse a las pandillas, muchas de ellas controladas por políticos y empresarios locales.

Como ya sabemos el verdadero objetivo es imponer más miserias y explotación a los trabajadores haitianos.

En 2004, la ONU vino a Haití para imponer la voluntad imperialista estadounidense y europea a los trabajadores. El objetivo de la misión era estabilizar el país y crear un clima donde los patrones internacionales y locales pudieran explotar a los trabajadores. Después de 17 años, esa misión fracasó estrepitosamente. Esta nueva misión también está destinada al fracaso. Los trabajadores en Haití y en todo el mundo no necesitan la solución patronal para resolver su problema. El capitalismo no tiene respuestas a los problemas de la humanidad. Debe ser destruido. Sólo una revolución comunista puede lograr este objetivo.
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Corre en memoria del compañero Fernando
El 1 de octubre se celebró la primera (con suerte anual) Braga 5K Memorial Run en Vassar College en Poughkeepsie, Nueva York. La carrera lleva el nombre de nuestro camarada caído Fernando Braga, quien se suicidó el año pasado. (Su obituario apareció en DESAFIO, 20 de julio de 2023). Varios miembros del Partido Laborista Progresista (PLP), amigos y familiares participaron en la carrera y otros que conocemos ayudaron a organizar el evento. La carrera (y caminata) de 5 km sirvió para recaudar fondos para el fondo universitario de la hija de Fernando y para organizaciones dedicadas a detener el suicidio de veteranos.

Si bien fue un día emotivo para muchos, también fue una oportunidad para honrar a Fernando construyendo relaciones en torno a las ideas por las que luchó. Él “no era sólo un veterano sino un veterano de Irak contra la guerra”, les dije a varios participantes que conocí. Entre ellos se encontraban estudiantes de secundaria y universitarios. ¡El segundo clasificado incluso creció cerca de mí en Nueva York!

“Creo que ustedes dos se habrían llevado bien”, le dije a uno de los organizadores principales, que es profesor de la universidad. No conoció a Fernando desde que comenzó a enseñar después de que Fernando se graduó, pero imparte un curso sobre el oleoducto de la escuela al ejército. Espero poder ayudar con algo de la organización el próximo año y conocerlo mejor (y a otros).

Fernando fue el líder de mi club hace algunos años, brindando asesoramiento y liderazgo a nuestro colectivo en general, y a mí en particular. Siempre respeté la forma en que puso en práctica nuestra línea como estudiante, soldado y trabajador. En un momento en que éramos cercanos, luché con la decisión de unirme o no al ejército o seguir siendo un trabajador industrial. La experiencia de Fernando, la aplicación cuidadosa de nuestra línea y las consideraciones objetivas de mis fortalezas y debilidades brindaron una guía poco común que significó mucho para mí.

Antes de la carrera de 5 km, hubo dos discursos. Los partidarios del PL que asistieron acordaron que el año que viene nos aseguraríamos de hacer uno. El primer discurso fue pronunciado por un administrador de la escuela y reflejó algunos de los vínculos nacionalistas entre la universidad y el ejército. El otro, sin embargo, fue de uno de los amigos más cercanos de Fernando y compañero veterano en la escuela. Habló por muchos de nosotros en los 5K cuando dijo “apóyense unos a otros, díganse cuánto se aman, eso realmente importa. Si pudiera retractarme de algo, definitivamente le habría dicho lo que significaba para mí”.

¡Descansa en Poder Fernando!

Las bombas estadounidenses lanzadas por aviones israelíes caen sobre los niños
France24, 15/10—Los ataques de Israel en la Franja de Gaza han provocado una “catástrofe humana sin precedentes” en el territorio palestino, dijo el domingo la agencia de las Naciones Unidas que apoya a los refugiados palestinos (UNRWA). “Durante los últimos ocho días no se ha permitido entrar en la Franja de Gaza ni una gota de agua, ni un grano de trigo, ni un litro de combustible”, dijo a los periodistas Philippe Lazzarini, comisario general de la UNRWA. Más de 1.000 personas están desaparecidas bajo los escombros de los edificios destruidos por los ataques aéreos israelíes en Gaza, dijo el domingo el equipo de defensa civil palestino. Los ataques israelíes en la Franja de Gaza han matado al menos a 2.450 personas desde el sangriento ataque de Hamas contra el sur de Israel la semana pasada, dijo el domingo el Ministerio de Salud de Gaza.

Los trabajadores médicos palestinos experimentan crudas lecciones del capitalismo
Al Jazeera, 14/10—La Dra. Nisreen al-Shorafa apenas ha dormido 10 horas en los últimos siete días. Esta cirujana de 30 años dirige la sala de urgencias del hospital Al Awda en Tal al-Zaatar, entre Beit Lahia y Beit Hanoun, y no recuerda ningún momento en el que haya trabajado más duro. Dedicada por completo a ayudar a salvar a las personas que sobrevivieron al implacable bombardeo israelí, se ha esforzado más allá de lo que pensaba que podía hacer. El sábado, el hospital empezó a recibir llamadas de advertencia del ejército israelí. El mensaje era crudo y siniestro: el hospital tenía que ser evacuado porque sería bombardeado. “Apuesto a que ellos [el ejército israelí] están orgullosos de sí mismos y amenazan con bombardear el hospital”, dijo la enfermera residente Asala al-Batsh. “Insistieron en que todos y todo se movieran. Todo el personal del hospital, todos los pacientes, incluidos los de la UCI, y los cadáveres de la morgue”. Después de intentar explicar por teléfono al ejército israelí la inhumanidad y la imposibilidad de sacar a todos del hospital y dirigirlos hacia el sur, el equipo se dio por vencido. “Decidimos no irnos”, dijo al-Shorafa… El Ministerio de Salud palestino ha instado a la comunidad internacional a intervenir varias veces, pero no ha llegado respuesta ni asistencia.La crisis climática del capitalismo empeoraThe Guardian, 5/10—Al menos 43 millones de desplazamientos infantiles estuvieron relacionados con fenómenos meteorológicos extremos en los últimos seis años, el equivalente a 20.000 niños obligados a abandonar sus hogares y escuelas cada día, según ha descubierto una nueva investigación. Las inundaciones y tormentas representaron el 95% del desplazamiento infantil registrado entre 2016 y 2021, según el primer análisis de este tipo realizado por Unicef... El resto (más de 2 millones de niños) fueron desplazados por incendios forestales y sequías. En términos absolutos, China, Filipinas y la India dominan con 22,3 millones de niños desplazados (poco más de la mitad del número total), lo que el informe atribuye a la exposición geográfica de los países a condiciones climáticas extremas, como lluvias monzónicas y ciclones, y a las grandes poblaciones infantiles, además de como un aumento de las evacuaciones preventivas. En agosto de 2022, unas inundaciones sin precedentes sumergieron bajo el agua un tercio del Pakistán, causando miles de millones de dólares en daños y desplazando a alrededor de 3,6 millones de niños, muchos de los cuales pasaron meses sin acceso a un alojamiento adecuado, a agua potable y a servicios sanitarios.Los liberales nos recuerdan que también atacan a los inmigrantesGothamist, 1/10—Un alto asesor del alcalde Eric Adams pidió el domingo al gobierno federal que “cierre las fronteras” para evitar que más inmigrantes lleguen a la ciudad de Nueva York. “Necesitamos que el gobierno federal, los miembros del Congreso, el Senado y el presidente hagan su trabajo: cerrar las fronteras”, dijo la asesora principal de Adams, Ingrid Lewis-Martin, durante una entrevista en PIX11. “Y hasta que se cierren las fronteras, es necesario idear una estrategia de descompresión total que permita tomar a todos nuestros migrantes y trasladarlos a lo largo de nuestros 50 estados”. Los comentarios de Lewis-Martin marcaron una escalada en la retórica de la oficina del alcalde en torno a la crisis migratoria de la ciudad... Lewis-Martin dijo que más de 61.000 inmigrantes permanecen bajo el cuidado de la ciudad. El llamado a “cerrar las fronteras” se parecía a los comentarios hechos por varios miembros de derecha del Congreso que amenazaron con cerrar el gobierno federal si no se incluían políticas fronterizas estrictas en un nuevo proyecto de ley de financiación.