Puerto Príncipe, Haití, 18 de septiembre—Las crecientes demonstraciones en contra del presupuesto nacional anti-obrero comienzan su tercera semana, la lucha de clases aquí se esta intensificando. Se hizo un llamado a una huelga general por parte de los obreros del transporte, seguido por dos días más de demonstraciones. De la capital a las provincias, hasta 10,000 personas se han tomado las calles con ira para protestar los ataques indignantes hacia la clase obrera, incluyendo impuesto fijo de $186 dólares para acceso a servicios de administración pública y un impuesto anual de arrendador de 6 al 10 porciento. Por ejemplo, un individuo en una casa que valga $3226 dólares pagaría $326 dólares al año. El presupuesto de los patrones incluye más dinero para el funcionamiento del parlamento y el ala ejecutiva que para la educación y salud.
De acuerdo a Radio Kiskeya, la huelga fue un 95 porciento exitosa alrededor de la capital. También se respeto ampliamente en St. Marc, Petit Goave, Les Cayes, e Hinche, todos los grandes centros de población. Líderes del sindicato le han llamado a esto un golpe de advertencia. Si el gobierno persiste en continuar con el presupuesto, se planearan mas acciones.
Animados por los dotes teatrales de un senador que rompió el presupuesto en el piso del senado, las protestas comenzaron con cientos tomándose las calles. Aunque ha estallado una pelea de perros entre los políticos en el Parlamento, no va a poner un final a la explotación capitalista. Solo la lucha de clases consiente puede llevar a una revolución comunista y aplastar el capitalismo. Los obreros están votando con sus pies por una demonstración masiva para organizar a más personas en contra del gobierno. Muchos han hecho un llamado a romper o quemar el presupuesto, pero la revolución es la única manera para dirigirse a las necesidades de los obreros y estudiantes de Haití.
Los patrones y su policía están tratando de suprimir estas demonstraciones por que amenazan la estabilidad de lo que han llamado localmente “restavek” burguesa. (Restaveks son los niños de los sectores más pobres de la clase obrera, comprados por los ricos como esclavos domésticos). La policía les han respondido a los manifestantes con balas vivas y gas lacrimógeno. Han lastimado a muchas personas, y el gas a permeado la casa de los obreros.
En Puerto Príncipe, las demonstraciones culebrearon por la ciudad, hacia los barrios de clase media como Petionville, viviendas de los propietarios de tiendas que tienen productos que a menudo son inaccesibles para los obreros, y hasta Pelerin, donde vive el presidente Jovenel Moise. La policía ha sido particularmente brutal mientras protegen propiedad privada de los ricos.
Estudiantes de la Universidad del Estado y otros se reunieron al frente de la Facultad de Etnología en la Universite d’Etat d’Haiti. Recaudaron dinero para rentar un sistema de sonido y comprar materiales para las pancartas. Tomándose las calles, artistas entre otros militantes cantaron canciones revolucionarias denunciando los burgueses y el estado en un concierto llamado “Concierto de ruptura, quemen el presupuesto.” Los trabajadores tomaron el llamado y le añadió sus propios versos, como “rómpanlo, quemen el parlamento.” Después de cada verso, diferentes personas se tomaron el micrófono, para animar a la gente a unirse a la lucha. Un miembro del Partido Laboral Progresista sentó el tono haciendo un llamado para combatir los patrones hasta el final: “No nos van a pedir pagar por lo deberían ser nuestros derechos. Es necesario revelarnos en contra del sistema burgués, que sueña solo de mas explotación de las masas.” Cada vez que un periodista trataba de cuestionar un PLPista, el respondió batiendo su letrero: “Este presupuesto es una conspiración del Estado y de los burgueses en contra de las masas.”
En un pueblo provincial, hasta mil personas- prácticamente toda la población- bloquearon las calles mientras se unieron al movimiento popular, respondiendo al llamado del PLP a combatir en contra de los patrones.
Los PLPistas tienen el propósito de darle un tipo de liderazgo político diferente a estas movilizaciones. Al final del concierto en Puerto Príncipe, la gente comenzó a gritar. “ ¿ A donde vamos? Al Parlamento a romper y quemar el presupuesto criminal, anti-personas.” Los PLPistas llamaron por una “revolución anti-capitalista.” Muchos en la manifestación, que creció en números mientras marchaban por las calles, también tomaron este coro. Llegando al Parlamento, el grupo denuncio los políticos burgueses y sus patrones capitalistas por varias horas, amenazando a invadir y quemar el parlamento. La policía asignada a proteger el gobierno fue inefectiva en contener la ira del grupo.
La lucha en Haití debe continuar en la base de la lucha de clases, no favoreciendo líderes políticos o del parlamento quienes buscan apoyo de masas para las elecciones de los patrones. Conductores de taxis, obreros, vendedores de la calle- la mayoría gente que conocimos acordaron con esta lucha. La lucha de clase crece diariamente en Haití. Las masas cada vez más entienden su situación y explotación que están encarando. La clase obrera se esta fortaleciendo día a día aquí.
Nuestra clase debe dar el paso a liderar y exponer los liderzuelos, sean los cómplices burgueses, nacionalistas reaccionarios, o izquierdistas falsos quienes patrocinan reforma y elecciones por encima de revolución comunista. Es nuestro trabajo ganar los corazones y mentes de los obreros, estudiantes y soldados. Es nuestra responsabilidad organizarlos a una fuerza luchadora a destruir el sistema capitalista y todo lo que representa: explotación, racismo, sexismo, fronteras nacionales, guerras imperialistas. Es nuestro imperativo construir una nueva sociedad basada en igualdad, donde los obreros gobiernen en nuestro propio interés.