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Educación: Dirigir ira contra gobernantes, sembrar unidad entre nuestra clase
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- 21 Noviembre 2020 108 visitas
CIUDAD DE NUEVA YORK, 18 de noviembre —La gestión racista de la pandemia por parte de los jefes liberales de la ciudad de Nueva York (NYC) se está intensificando. La cantidad de estudiantes con Covid-19 ha llevado a los engaños al gobernador Andrew Cuomo y al alcalde Bill de Blasio a cerrar edificios escolares.
Estos dos últimos meses le han enseñado a la clase trabajadora (estudiantes, padres y trabajadores de la educación) algunas lecciones. El Partido Laborista Progresista está discutiendo y compartiendo nuestras experiencias, lecciones y luchas.
Esta semana, la ira de los maestros estalló en las reuniones del departamento en dos escuelas secundarias diferentes de Brooklyn. Es bueno que la frustración de los profesores no se dirija a los estudiantes. Los líderes escolares que no tienen ni idea de cómo involucrar a los estudiantes en el aprendizaje exigen que los maestros “lo resuelvan”. El calor en los edificios no es suficiente ya que también necesitamos tener ventanas abiertas para ventilación. A través de una lente consciente de la clase, la ira de los maestros se dirige a los jefes de la escuela, no a los estudiantes.
En las escuelas donde las ideas comunistas tienen historia, los capítulos sindicales han ganado una idea pro-estudiantil, que es que nuestra presencia como trabajadores de la educación en los edificios escolares es importante para garantizar que es seguro regresar. De lo contrario, los jefes tomarán atajos que ponen en riesgo la salud de los estudiantes. Parte de la ideología de “yo primero” que enseña el capitalismo está siendo cambiada a una ideología más pro-estudiante.
Pero en las escuelas donde las prácticas comunistas han echado raíces, los “equipos de equidad” están cambiando de hablar de ideas a tomar acción. Un ejemplo es ofrecer apoyo a los maestros para abordar cualquier problema racista en las aulas.
Los jefes capacitan a los maestros para que piensen que cuando las cosas van mal, deben culpar a los estudiantes y a sus padres. Pero la mayoría de nosotros también sabemos que el propósito principal de las escuelas bajo el capitalismo no es educar a los estudiantes de la clase trabajadora para que se conviertan en humanos con pensamiento crítico, sino más bien recrear las desigualdades capitalistas y enseñar a los estudiantes a aceptarlas.
No es de extrañar, entonces, que la educación híbrida y remota sea un desastre que deje frustrados tanto a los estudiantes como a sus educadores. Por ejemplo, es difícil enseñar a una clase de estudiantes cuando sus cámaras están apagadas. Los niños están deprimidos porque viven en un mundo donde no existe la sensación de un futuro estable, a corto o largo plazo.
Es necesario enseñar a los estudiantes que su ira y tristeza es una respuesta completamente lógica a la crisis del capitalismo. Sobre todo, es necesario enseñar a los estudiantes que tienen que formar parte de un movimiento para aplastar este sistema racista. Como maestros comunistas y antirracistas, esa es la lección más importante que podemos enseñar. Cuando se sienta frustrado en la escuela, ¡la solución es ser más político con los estudiantes!
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Para derrotar el ejército patronal, necesitamos nuestro propio ejército rojo
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- 21 Noviembre 2020 108 visitas
“Para derrotar el ejército patronal, necesitamos un Ejército Rojo propio”
“Te presentas a la manifestación y te dices, con el armamento, con los números, con el carro de combate, con la guardia nacional, con todo lo que nos dicen: “Los vamos a lastimar si no regresan a sus casas. Los vamos a lastimar si no parran. Les causaremos daño físico”. “Uno no pone al público en inminente riesgo y ellos pretenden como que nosotros somos los agresores.”
Chicago, 17 de noviembre—Los estudiantes y trabajadores anti-racistas aquí siguen comprometidos en luchando contra el sistema racista patronal y los policías racistas. Específicamente, continuamos de apoyar la campaña masiva anti-racista para liberar al artista/activista negro, Jeremy “Mohawk” Johnson, quien fue arrestado durante una manifestación anti-policial racista en el centro de Chicago en Agosto. El sigue bajo arresto domiciliario (Vea el DESAFIO de 11/4 y 11/18.) Miembros del Partido Laboral Progresista (PLP) luchan para construir esta lucha, no solamente para Mohawk, nuestro hermano de clase, sino para todos nuestros miembros de clase trabajadora cuyas vidas han sido acortadas y destrozadas por el capitalismo.
Como hemos visto, no solamente en este verano pasado, sino por muchas décadas, luchando contra el capitalismo y el aparato estatal masivo que lo mantiene, será un sangriento y prolongado batalla. Desafortunadamente para nosotros, los patrones ya han construido su ejército; invirtiendo millones y millones de billones de dólares para su fuerza militar, la policía racista, La Migra ICE y sus tribunales racistas para aterrorizar a los trabajadores con deportaciones, desalojos, condenas en prisión injustas e incontables tácticas que continuaran a traumatizar y causar daño a la clase trabajadora.
La única manera para derrotar el capitalismo es de comenzar una revolución comunista bajo la bandera del PLP. De otra manera, sufriremos interminables guerras y la opresión capitalista. El capitalismo significa la ruina de nuestra clase, nuestras familias e amigos. El capitalismo es la dictadura patronal. Ellos detienen el poder a través de sus partidos políticos, sus policías, sus tribunales y su militar. Ellos pretenden ser democráticos, pero su “democracia” es un fraude. Solamente el comunismo mundial ofrece a los trabajadores, soldados y estudiantes una alternativa a la miseria del capitalismo.
Por este motivo continuamos luchando y construyendo comunidad entre cada uno de nosotros como organizadores, estudiantes y trabajadores. Queremos una sociedad donde los trabajadores dirigen todo en el interés de los trabajadores del mundo. Queremos un sistema que motiva a cada trabajador a que esté involucrado en dirigiendo la sociedad; que entrena a todos a que actúen en favor del bien común en vez de ser individualista “que va a lo suyo”. La sociedad comunista se opone en poniendo los intereses egoístas sobre las necesidades sociales.
Por este motivo, nosotros como luchadores anti-racistas, necesitamos continuar de presentarnos a cada manifestación, marcha, plantón, reunión, apoyo tribunal y salir en huelga para mostrarles a los patrones que nosotros también tenemos un ejército. Nosotros en el PLP estamos construyendo un enorme Ejército Rojo internacional de trabajadores que luchará para terminar con el capitalismo y destruir el sistema opresivo que nos mantiene abatido.
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Capitalismo estadounidense aun en decadencia; trabajadores necesitan el comunismo
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- 06 Noviembre 2020 108 visitas
La elección presidencial estadounidense – aun sin decidirse al imprimir esta edición –muestra al mundo, el caos, la decadencia y el declive de la clase dominante estadounidense. Mientras los racistas Donald Trump y Joe Biden luchan por el poder representando a dos campos de la clase dominante, y mientras los “observadores” arremeten contra el centro de conteo en Detroit, lo que nos espera es horrible, a final de cuentas.El mundo ha cambiado desde el 2000, cuando los demócratas cedieron en la elección de Al Gore, y ambos partidos aun jugaban en el mismo equipo. Lo que esta en juego es mucho mas grande. El futuro del capitalismo estadounidense, la legitimidad de su “democracia”, el destino de su orden mundial liberal, todo esta en juego.
El imperio estadounidense esta de picada. Mientras la pandemia continua sin freno en EE.UU. y Europa, el rival imperialista; China, que ya es la economía mas grande del mundo, gana terreno día a día. Los patrones de energía domestica, aisladores - dirigidos por las familias Koch y Mercer, con Trump como su patológico representante – han tenido que tomarse el partido republicano y sus bases de racistas blancos y los matones nacionalistas.Después de dos fiascos electorales seguidos, los liberales globales del capital financiero – los sangrientos patrones que han gobernado desde la segunda guerra mundial – están en la cuerda floja, lo cual los hace aun mas peligrosos.
Pero, aun cuando no podemos predecir quien ganara las elecciones capitalistas, hay mucho que si sabemos:
Sabemos que el capitalismo significa alienación. A pesar de que mas gente que nunca se ha presentado a votar, alrededor de uno de tres votantes elegibles – unos 80 millones de trabajadores no se molestaron en votar (USA Today, 3/11). Millones mas fueron a las urnas por miedo a que ganara Trump. Ellos ven a Biden como lo que es; un criminal, amigo de segregacionistas y policías asesinos, arquitecto de las encarcelaciones masivas racistas, guerrerista del Medio Oriente y fiel lacayo del deportador-en-jefe Barack Obama.
Sabemos que no importa quien gane las elecciones, las necesidades del capitalismo serán el motor que propale el fascismo estadounidense y la guerra inter-imperialista.Después que los patrones arreglen su casa, y un ala aplaste a la otra, aumentaran sus ataques asesinos contra nuestra clase.
Sabemos que el sistema de ganancias, sin importar quien sea el presidente, no puede proteger la salud y vida de los trabajadores. Por décadas, los demócratas y republicanos han cerrado hospitales y han recortado los recursos para la salud publica. La historia es la misma en todo el mundo, y es por eso que cientos de miles mueren de covid-19 en América Latina, Asia, África, y Europa.
Pero, mas que nada, sabemos que, hoy mas que nunca, debemos unirnos y construir el Partido Laboral Progresista, para organizar a la clase trabajadora internacional, para que se convierta en una fuerza de lucha para destruir el capitalismo de una vez por todas.
Maligno si, menos no
Antes de las elecciones, los patrones liberales nos bombardearon con el mensaje de la política del menor de los males. Aunque Biden no es perfecto, nos decían, lo que importa ahora es sacar al racista, sexista e incompetente de Trump.Pero, en el actual periodo, cuando los patrones no pueden gobernar como antes, el trabajo del presidente estadounidense – no importa de que partido sea o su personalidad – es manejar las crecientes contradicciones de su sistema. No es que los patrones escojan el fascismo; sino que es una necesidad del capitalismo en crisis. La diferencia entre los dos campos gobernantes es estratégica.Las fuerzas detrás de Trunp, enfocadas en ganancias a corto plazo, usan su racismo de alcantarilla para mal dirigir a los trabajadores blancos, dividir a nuestra clase, y construir una defensa predominantemente blanca, una fuerza armada “Fortress America”. Quienes apoyan a Biden, los capitalistas financieros, buscan defender su abatido imperio con un movimiento multicultural, patriótico y un ejercito que prevalezca en una guerra con China.
El circo de las elecciones presidenciales ha mostrado la feroz lucha entre estas facciones. Los eventos de las recientes semanas nos muestran una clase dominante estadounidense en ruinas: Trump, al negarse a aceptar la sagrada “transición de poder” de los patones; la hipocresía rancia de los republicanos al posicionar a la anti- aborto Amy Coney Barret a la Suprema Corte; la falsa moralización, de ambos lados, sobre la corrupción. Da como resultado la perdida de legitimidad; “[E]l propio concepto de la confianza publica es un grupo de hechos establecidos necesarios para la operación de una sociedad democrática que ha erosionado durante la presidencia [de Trump], con posibles ramificaciones a largo plazo” (New York Times, 1/11).
Los liberales capitalistas financieros saben que esta falta de confianza por parte de los trabajadores destruye su posibilidad de derrotar a sus rivales imperialistas. Ellos ven esta eleccion como una oportunidad de restaurar su poder y salvar su sistema. Utilizan al racista Joe Biden y la policía mayor Kamala Harris para tratar de convencer a los trabajadores que las reformas capitalistas pueden eliminar el terror policial racista, la ruina económica, la guerra imperialista, y la catástrofe climática.
La clase trabajadora esta en pie de lucha
La historia nos muestra que un cambio positivo para los trabajadores es generado por la lucha de clases y los movimientos de masas militantes, no votando. La esclavitud y Jim Crow, el sexismo y las leyes anti- aborto, las ilimitadas semanas laborales y la legalización del trabajo infantil – todas fueron derrotadas a través de la lucha de clases. Los trabajadores no votaron sobre los avances del movimiento de derechos civiles. No votaron para aniquilar a los Nazis – o para derrotar la maquina de guerra estadounidense en Vietnam. En cada uno de estos casos, las masas de valientes trabajadores abrieron el camino hacia la victoria; luchando, muchas veces bajo liderato comunista. Desafortunadamente, ninguna de estas batallas históricas golpeó en el corazón del capitalismo. Es por eso que casi todas estas victorias han sido revertidas. El PLP pide a todos los trabajadores que luchen – en el trabajo, en las calles, en las escuelas. Pero, también es necesario transformar las luchas por reformas en un ataque a todo el sistema capitalista.
Para remplazar el capitalismo, construiremos una sociedad comunista, diseñada para llenar las necesidades de los trabajadores, no de los patrones ni su sistema de ganancias. Los trabajadores somos quienes creamos todo lo de valor. Somos quienes manejamos las maquinas, volamos los aviones, cuidamos de los enfermos, enseñamos a nuestros jóvenes. Nosotros podemos dirigir la sociedad, las ganancias y el dinero serán abolidos. Todos tendremos viviendas decentes, alimento, y ropa. En una sociedad dirigida por trabajadores, el racismo y sexismo – herramientas esenciales de los capitalistas para dividirnos y explotarnos – serán prohibidos. Nuestras comunidades serán integradas y libres de fronteras. Cada individuo podrá desarrollarse en todo su potencial, pero la colectividad será primaria. Los trabajadores tendrán tiempo de desarrollar nuevas habilidades, en vez de trabajar sin descanso para los patrones y sus ganancias. La creatividad florecerá. La ciencia será utilizada para crear un ambiente saludable y el avance de toda la sociedad.
Los anteriores seis meses han probado que la clase trabajadora no ha perdido su espíritu de lucha. Seguimos luchando por George Floyd, Breonna Taylor, Ahmaud Arbery, Walter Wallace Jr., Marcellis Stinnette, y muchos otros mas. Seguimos luchando contra todas las desigualdades racistas enraizadas en este sistema capitalista asesino. Decidas votar o no, tienes una decisión mas importante frente a ti: Luchar en tu trabajo, en tu escuela, en tu barrio. Y, la decisión mas importante de todas, unirte al PLP, para ayudar a crear un mundo donde los Trump, Biden, y sus amos jamás vuelvan a tener el poder.
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Por Walter Wallace Jr, Destruir el terror policial racista
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- 06 Noviembre 2020 107 visitas
FILADELFIA, 31 de octubre—Cuando los policías racistas dispararon 14 tiros y asesinaron a nuestro hermano de clase Walter Wallace Jr., más de una docena de trabajadores respondieron al llamado del Partido Laboral Progresista de llevar la solidaridad a las masas de manifestantes aquí. Esta acción reafirmó la necesidad de la unidad multirracial y la política comunista internacional como fuerza fundamental para acabar con el terrorismo racista. En el PLP, luchamos para ganarnos a nosotros mismos y a la clase trabajadora para construir la conciencia de clase a través de las lecciones aprendidas participando en levantamientos antirracistas de la clase trabajadora.
Mientras que los medios de comunicación de los patrones promueven agresivamente el voto, la política basada en la identidad y las divisiones racistas, los trabajadores de Filadelfia lucharon contra el asesinato racista por los policías racistas de Walter, de 27 años. Sufriendo de un episodio mental, necesitaba trabajadores médicos, no la policía terrorista. Esto, junto con la intensificación de las condiciones racistas en Filadelfia, provocó una rebelión que terminó con la destrucción de la propiedad de los patrones.
Días antes de las elecciones, el candidato presidencial Jim Crow Joe Biden les dio la espalda a las masas en Filadelfia cuando se le preguntó sobre sus pensamientos sobre el saqueo en el Walmart cercano (NPR, 28/10).
Los comunistas dicen que las acciones de los trabajadores son una reacción al saqueo o la violencia que la clase dominante inflige a la clase trabajadora internacional todos los días. Con razón, durante las noches más feroces de los levantamientos, los trabajadores derribaron los carteles de Biden haciendo la conexión de que la democracia capitalista no puede desafiar el terror policial.
Desde Nigeria hasta Filadelfia, los trabajadores negros de todo el mundo están liderando la lucha de la clase trabajadora internacional para establecer el vínculo entre el terror policial racista y el capitalismo. Este impulso revolucionario de la clase trabajadora será atacado o manipulado por un grupo de patrones contra otro a menos que esta lucha para terminar con la policía imperialista militarizada de los patrones se transforme en una lucha internacional de la clase trabajadora por el comunismo.
DESAFÍO comunista revolucionario les gusta a las masas
Una protesta #EndSARS de más de 100 trabajadores en Newark el 17 de octubre aumentó la confianza de los miembros del PLP de Nueva Jersey que planeaban nuestra reunión en Filadelfia. El terror al que se enfrentan la familia y la comunidad de Walter Wallace Jr. refleja la represión financiada por el estado que las familias luchan en Nigeria. En Nigeria, el Escuadrón Especial Antirrobo (SARS) ha secuestrado, violado, golpeado y retenido a cientos de trabajadores para pedir rescate y los ha matado a ellos y a sus familias si no cumplían con sus demandas extorsivas.
En Filadelfia, Cathy Wallace había llamado a una ambulancia para ayudar con su hijo que estaba teniendo una crisis de salud mental y la respuesta del sistema capitalista parasitario fue la policía armada. El furioso levantamiento que resultó se encontró con helicópteros flotando y el alcalde demócrata Jim Kenney impuso un toque de queda en la ciudad dos veces y trajo a la Guardia Nacional.
La principal contribución del PLP en ambas protestas fue compartir el periódico DESAFÍO y las ideas comunistas que promueven la unidad multirracial revolucionaria y de clase. Un PLPista le dijo a un trabajador: “Tú y yo, como trabajadores nigerianos y mexicanos, tenemos más en común entre nosotros que con los ricos de cualquier país. Siempre que cualquiera de nosotros sea atacado, toda la clase trabajadora internacional tiene que levantarse. De eso se trata este artículo “.
El trabajador de Nigeria animó a que este mensaje se repitiera en el micrófono frente a la multitud. En Filadelfia, se distribuyeron 100 copias del DESAFÍO entre un grupo multirracial de 1.000 trabajadores. Nuestros cánticos “De Filadelfia a Nigeria, los KKKops racistas tienen que irse” y “Asiáticos, latinos, negros y blancos: para aplastar el racismo, debemos unirnos” animaron a otros trabajadores enojados a nuestro alrededor para que dispararan sus voces. Las familias negras y latinas de la clase trabajadora respondieron con vítores desde porches y aceras en respuesta a los cánticos y periódicos antirracistas.
La unidad multirracial necesaria para ganar
Después de la protesta, se utilizó un artículo de un número anterior de CHALLENGE para iniciar una conversación sobre la política de identidad. Trabajadores negros, blancos y latinos realizaron un grupo de estudio, ofreciendo preguntas sobre el liderazgo negro y un análisis colectivo de las políticas de identidad.
Luchamos sobre si la política con un análisis de clase debería ser primordial. Los líderes basados en la identidad solo llevarán a los trabajadores a la política electoral y al nacionalismo. Ras Baraka de Nueva Jersey, Lori Lightfoot de Chicago, Andrés Manuel López Obrador de México, Jim Crow Joe Biden y Fiscal Patrona Kamala Harris no son amigos de nuestra clase. Solo sirven para ganarnos al nacionalismo y convencernos de que apoyemos a los patrones estadounidenses en las guerras contra sus rivales imperialistas.
La política comunista no significa nada sin la construcción de base
Independientemente de quién presentó o no su voto por el menor de dos males, el sistema capitalista seguirá manteniendo cautiva la conciencia de los trabajadores. Muchos trabajadores, desde Filadelfia hasta Newark y Nigeria, están temporalmente invertidos en trucos políticos liberales y creen que quienes luchan para acabar con este sistema son ingenuos. Entonces, la construcción de bases en nuestras comunidades para una lucha a largo plazo hacia la revolución comunista es clave. Debemos luchar y compartir las ideas comunistas con más frecuencia, no solo reaccionar ante los ataques más intensos del patrón. Levántense juntos y rebélense. ¡Únase a PLP hoy!
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LA: trabajadores golpean policías racistas en las calles y juzgados
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- 06 Noviembre 2020 102 visitas
Los Angeles, 17 de Octubre—Una docena de trabajadores militantes salimos hoy a las calles a protestar el asesinato racista de David Flores cometido por los policías fascistas Andrew Do y Bryan Tahuite, del Departamento de Policías de Los Angeles (LAPD). En una impresionante muestra de solidaridad, los familiares de otras cuatro víctimas de la policía, salieron a hablar y apoyarnos bajo el liderazgo arrollador de las mujeres de clase trabajadora.
En los dos días previos a nuestro mitin y marcha, la policía de Los Angeles y el Departamento del Alguacil asesinaron a dos trabajadores más cada uno. A pesar de lo masivo de las marchas multirraciales contra el terror policial racista en Los Angeles durante todo este verano, estos matones, lacayos de la clase patronal, siguen acosando a nuestra clase. Las protestas anti racistas masivas son esenciales e impresionantes. Pero sin una perspectiva revolucionaria comunista y un plan para derrocar y aplastar todo el sistema capitalista, nunca vamos a lograr una verdadera justicia para nuestra clase. Eso es lo que se propone el Partido Laboral Progresista (PLP).
David Flores fue la primera persona en su familia que se graduó de la secundaria y fue a la universidad. Tenía dos trabajos de construcción para poder mantener a sus dos hijos. Como para tantos otros trabajadores, sus hijos eran la motivación y la razón de su dura lucha por la existencia. Su madre, Teresa, está ahora luchando por la justicia para su hijo.
Nuestra protesta comenzó en una esquina, cerca de donde asesinaron a David el 22 de Abril del 2019. Los trabajadores nos recibieron con afecto en este vecindario mayormente negro y Latino. Mientras nos congregábamos, los autos que pasaban tocaban sus bocinas y bajaban la velocidad para escuchar los discursos y llevarse volantes o un Challenge-Desafío.
Después del mitin, como 30 de nosotros iniciamos la marcha y caravana a la Estación Sud-Este. Al acercarnos, tres fascistas de azul trataron de cerrarnos el paso. Sin embargo, rápidamente un enojado grupo de familiares, miembros del PLP y otros participantes los rodeamos. A los pocos minutos fueron a esconderse, detrás del portón automático de su lote de estacionamiento.
Mientras bloqueábamos el portón con nuestros cuerpos, los policías, en Inglés y en Español, nos amenazaban con arrestarnos si no nos íbamos. Pero nos mantuvimos imperturbables. Tres jóvenes que viven al frente de la calle empezaron a corear a viva voz la consigna, “Black Lives Matter”. Nosotros denunciamos a los esbirros que ridiculizaban nuestras consignas, mientras distribuíamos volantes y el periódico y conversábamos con los trabajadores que viven cerca de esa estación. Varios filmaron nuestra protesta y nos dieron su apoyo unánime.
Teresa y un familiar de cada una de las otras cuatro víctimas hablaron en el megáfono. Las terribles historias de sus pérdidas fueron conmovedoras, pero lo más resaltante fue la cólera de la clase trabajadora como respuesta a sus apasionadas demandas de justicia. Después de dos horas de discursos y de bloquear el portón del estacionamiento, cumplimos con nuestro objetivo de ese día. Nos comprometimos a continuar la lucha para aplastar el racismo y, antes de irnos, les gritamos a los policías de la Estación Sud-Este que nos iban a volver a ver.
Tres días más tarde, se programó la reunión semanal de la Comisión Policial de Los Angeles (LAPC) para discutir el asesinato de Alex Flores, el 19 de Noviembre del 2019. La Comisión, sin embargo, no hace más que ponerle sello de aprobación a los asesinatos que comete la policía. Discutieron el caso “a puerta cerrada”. Es raro en extremo que se discipline a un policía asesino cuando mata a uno de nuestros hermanos o hermanas de clase. El fiscal municipal de Los Angeles, sin duda, le recomienda al Departamento de Policías que no presenten ningún dato que pueda ayudar de alguna manera a que los familiares formulen un caso por derechos civiles contra la policía y el municipio.
Como la familia de Alex estaba decidida a contarle su versión de la historia a la Comisión, varios miembros del PLP y otros participamos por vía virtual. Así fuimos testigos de una parodia racista. La Comisión había declarado el día anterior que se programarían 10 minutos para que hablase la familia. Pero los Comisionados, sentados en sus lujosas oficinas, sólo les permitieron hablar 6 minutos porque el día anterior no les habían dado los nombres de los familiares que iban a hablar. Se les notificó con anticipo que se iba a necesitar un traductor para el padre y la madre de Alex. Por supuesto, hubo un “problema técnico” y no encontraron un servicio de traducciones disponible. Una secretaria sustituta de la junta masacró lo que los padres de Alex dijeron, y dejó de traducir a propósito la declaración que, “todos los policías son racistas”.
Otros oradores apoyaron la lucha de la familia Flores y condenaron fuertemente a la Comisión por tolerar regularmente los asesinatos que comete la policía. Pero los fascistas-de-azul y sus cómplices también se organizaron para hablar. Atacaron a Alex y su familia tildándolos de “pandilleros”, entre otras sucias mentiras. Estos son los mismos policías racistas del Departamento de Los Angeles cuyos colegas han sido descubiertos poniendo falsamente el nombre de miles de jóvenes, en su mayoría negros y Latinos, en la lista estatal de datos “CalGang” que los acusa de pandilleros y permite que se les achaquen cargos más severos.
El PLP debe seguir ayudando a liderar la lucha por la justicia para la familia de Alex Flores y muchos otros. Las mujeres trabajadoras, que en su mayoría lideran estas campañas, desafían los roles machistas que el capitalismo le impone a nuestra clase. A través de esta tarea, más gente comprende la verdadera función de la policía en la sociedad capitalista y ven al PLP a la vanguardia de la lucha contra estos asesinatos. Las ideas comunistas se van a propagar más y el partido va a crecer. Solo una sociedad comunista podrá eliminar a los matones armados de los patrones que protegen la propiedad privada y mantienen el dominio capitalista.