Los comunistas aspiramos a servir a la clase trabajadora proveyendo valientemente, liderato a la lucha de clases, modestamente y sin la grandilocuencia de los politiqueros patronales. Cecile Rol-Tanguy, es un ejemplo para todos nosotros. Murió el 8 de mayo de 2020 a la edad de 101 años. Probablemente nunca oíste hablar de ella, pero su vida es una inspiración en la batalla contra los efectos catastróficos del capitalismo.
El papel histórico de los comunistas ha sido advertir sobre la guerra y luchar contra el fascismo, el capitalismo en su ultimo estado. Conforme el fascismo continúa surgiendo alrededor del mundo, nosotros vemos como nuestros predecesores lucharon contra el fascismo durante la segunda guerra mundial.
Cecile, orgullosa líder comunista
Cecile fue líder de la resistencia francesa cuando los nazis ocuparon Francia en los 1940. Alemania había instalado el gobierno colaboracionista French Vichy, bajo Petain para controlar la oposición francesa. La resistencia jugo un papel heroico en la lucha contra los nazis y los traidores franceses. Ellos atacaron nazis, organizaron y distribuyeron propaganda, rescataron soldados aliados, sabotearon armamento enemigo, y liberaron Paris en agosto de 1944.
Cecile fue líder comunista de la resistencia, siguiendo el ejemplo de su padre François Le Bihan, un electricista y miembro fundador del Partido Comunista Francés en 1920, él fue asesinado por los nazis en el campo de muerte de Auschwitz. “Yo nací dentro de una familia anti-fascista, o para ser mas precisa, una familia comunista”, dijo Cecile (The Washington Post, 13/5). Ella creció en un hogar que también albergaba refugiados comunistas y exiliados de toda Europa.
Cecil también conoció a su esposo en la lucha. Se caso con Henri Rol-Tanguy, líder de la resistencia comunista. Dedicaron sus vidas en la lucha contra la España y Alemania fascistas. Durante las primeras etapas de su relación, el fue voluntario en las Brigadas Internacionales que luchaban en la Guerra Civil Española.
Mi fortaleza era mantenerme serena
Como oficial de enlace, Cecile utilizo su capacidad de burlar la ocupación nazi de Paris, llevando volantes anti-fascistas, pistolas, balas, granadas y planes de ataque, entre otros suministros, en el carrito de su bebe mientras maniobraba por toda la ciudad, posando como una inocente madre parisina. En una entrevista, Cecile dijo; “mi fortaleza estaba siempre en mantener la serenidad” (The Washington Post, 13/5).
Ella y sus hijos vivieron con la madre de Henri, casi no tenían que comer. Su bebe mas pequeña murió bajo estas circunstancias después de la captura del padre de Cecile y la deportación al campo de concentración Auschwitz. Sabiendo que no tenia nada que perder, se sumergió en la lucha anti-fascista. “Mi padre había sido arrestado, no sabia donde estaba mi esposo, y había perdido a mi pequeña niña. ¿Qué me podía detener? Dijo en una entrevista al Times de Londres en 2012.
El lugar de una mujer esta en la lucha de clases
Mientras Henri fue alabado después de la guerra, Francia casi no reconoció su contribución por su incorregible identidad como comunista (The Washington Post, 13/5). Fue hasta 2014 y 2017 que Francia finalmente le dio dos prestigiados reconocimientos. Miles de mujeres francesas sufrieron como victimas propiciatorias de Francia después de la guerra. Las presentaron como colaboradoras, las desnudaron, marcaron y golpearon por, supuestamente, acostarse con nazis a cambio de seguridad y comida. Esta falsa óptica se convirtió en la imagen popular de las mujeres francesas, eclipsando los valerosos esfuerzos de estas mujeres en la resistencia.
Charles de Gaulle, líder anti-comunista del Ejercito Libre Francés, le quito el poder a los ejércitos de la resistencia. Dedicado a una Francia capitalista pro-occidental, les arrebato el crédito de la victoria francesa y casi no reconoció el importante papel insurreccional comunista. La lección es que los demócratas liberales, históricamente, juegan un papel anti-comunista. Ellos no son nuestros amigos, pues su intención es mantener el capitalismo.
Aunque el Partido Comunista Francés, al final, desperdicio su triunfo en Paris al entrar en una coalición gubernamental con los partidos políticos capitalistas, la resistencia francesa comunista nos muestra como podemos organizarnos bajo difíciles condiciones políticas, económicas, sociales, y psicológicas por un mundo basado en la igualdad y el poder obrero. Conforme los poderes imperialistas de China y EE.UU. avanzan hacia la guerra mundial, los comunistas y nuestros amigos en todos lados podemos inspirarnos de lideres como Cecile para llevar a cabo nuestro papel histórico de guerreros contra el fascismo. Algún día, podremos eliminarlos de una vez por todas con una revolución comunista.
Esfuerzo de una célula para organizar durante pandemia
El tiempo de encierro por la pandemia ha sido un tiempo de acción, que comenzó desde el principio de la cuarentena. Nuestro club ha estado muy activo realizando reuniones y grupos de estudios virtuales con nuestros amigos. También estamos participando en las reuniones y actividades de la organización comunitaria, donde estamos construyendo nuestra base. Hemos sido parte de sus campañas por la cancelación de la renta; el cierre de las cárceles de inmigración, donde nuestros hermanos están expuestos y muriendo por el Covid-19; y la aprobación de un paquete de más de tres mil millones de dólares por parte del gobierno estatal para las personas excluidas de la ayuda federal. Hemos distribuido muchos Desafíos, especialmente en las últimas dos protestas, y hemos expuesto siempre la línea de nuestro Partido.
En esas luchas por “reformas,” hemos participado de manera militante, dando liderato con nuestras consignas y con nuestro periódico, Desafío, en el cual se explica a las personas que el único camino es la Revolución Comunista, que llevará a los obreros al poder.
Me he sentido muy emocionado al participar con mis compañeros del club. Guiados por nuestra líder y otros compañeros, en especial, un amigo de otro club, quien es profesor de una escuela, y el que ha creado las reuniones por Zoom y en todas ha participado con nosotros. Hemos sido testigos y parte de estos días tan importantes que hemos vivido, para el desarrollo de nuestra ideología Comunista. Por eso en cada marcha, en cada protesta y en cada lucha hemos llevado nuestra línea.
Debemos seguir siendo parte de este movimiento que nos prepara para la Gran Batalla, para la derrota del capitalismo y el imperialismo, donde estaremos, en la primera línea de combate.
El comunismo es la salvación y el futuro de la humanidad. Únete a nuestra lucha.
*****
La marea del fascismo creciente
La lucha contra el terror policial racista continúa dándonos la responsabilidad de explicar el fascismo y exponer el papel de los políticos liberales en el desarrollo del fascismo.
Chris Dunn, de la NYCLU (Unión de Libertades Civiles de Nueva York), calificó la respuesta de la policía de Nueva York a la ola actual de protestas como “impactante y sin precedentes”. “No creo que en cincuenta años hemos tenido el nivel de protesta que hemos visto en la ciudad de Nueva York y ciertamente no hemos visto el nivel de violencia policial dirigida a los manifestantes”.
¡Al igual que todos los líderes liberales, el alcalde Bill de Blasio ha respaldado a los terroristas de la policía de Nueva York, incluyendo el acorralamiento de manifestantes que no representaban ninguna amenaza! El Comisionado Dermot Shea, sin embargo, ha denunciado las pocas reformas que de Blasio se ha visto obligado a firmar, incluida una prohibición de estrangulamientos como el que asesinó a Eric Garner en 2014. El alcalde no ha respondido a las críticas de Shea que implica que los policías pueden continuar con su brutal, mortal acciones de siempre para intimidar a los manifestantes multirraciales.
El giro más obvio del tornillo fascista han sido los soldados de asalto de Trump. En Portland, Oregón, los matones de la Seguridad Nacional en automóviles sin marcas, atacaron con gases lacrimógenos y arrestaron a los manifestantes antirracistas. El presidente también amenazó con hacerle esto a la clase trabajadora de Chicago. ¡Debemos movilizarnos más ampliamente y más fuerte que nunca contra este ataque fascista expandido!
Otra faceta de la opresión fascista es este tsunami de desalojos racistas en todo el país. Claramente, la policía es parte del arsenal de los patrones para hacer cumplir la falta de vivienda brutal y masiva causada por la depresión capitalista que se profundiza cada semana.
Nuestro club PL ha hecho un llamado a todos nuestros miembros y amigos para que se preparen a movilizar la lucha en cualquier lugar donde exista una amenaza de desalojo. Dos acciones de inquilinos ya han desafiado a los tribunales de vivienda en Brooklyn y el Bronx. Debemos unirnos a ellos.
¡Nuestro alcance organizativo está encontrando que nuestra base está abierta al análisis del Partido más que en años anteriores y están considerando unirse a nosotros! ¡Esta es la verdadera victoria!
DESAFÍO responde: Este pensamiento hacia el futuro es muy necesario en el próximo período. Si bien el pequeño fascista Trump puede ser el más obvio, el análisis aquí es incompleto. Si bien es difícil nadar contra la corriente, los comunistas deben advertir sobre la guerra y el fascismo liderado por los liberales. La clase dominante está dividida. Los grandes fascistas, los principales capitalistas financieros, están comprometidos al dominio de los EE. UU. De los recursos mundiales y la guerra mundial por tierra que tal dominio requerirá. Mientras tanto, los pequeños fascistas de orientación nacional, a quienes representa Trump, tienen poco interés en hacer los sacrificios que tal guerra requerirá. Los soldados de asalto de Trump no son el mayor peligro; los gobernantes liberales, que se hacen pasar por los salvadores y la alternativa a este sistema podrido, son el mayor peligro. Debemos atacar a los liberales al mismo tiempo que todos atacan a Trump. Si no lo hacemos, la marea alta del fascismo golpeará fuertemente a la clase trabajadora.
*****
Una perspectiva internacional clasista sobre Tulsa
El artículo de DESAFIO del 22 de julio sobre la masacre de Tulsa carecía de una perspectiva de clase internacional y miro la masacre como otra tragedia racista nacional de los Estados Unidos. El artículo no menciona el papel de los trabajadores inmigrantes radicales europeos, ni la ola masiva de huelga estadounidense y el susto rojo que desencadenaron el terror racista del gobierno estadounidense. Solo los anarquistas, los anticomunistas Trabajadores Industriales del Mundo (IWW) y el Partido Socialista, que buscaban una alianza con el capitalismo, son acreditados con alguna lucha contra los patrones capitalistas.
Una perspectiva de clase internacional revelaría que en 1917 los trabajadores rusos hicieron la primera revolución comunista y que Estados Unidos entró en la imperialista Primera Guerra Mundial contra Alemania. En 1918 se enviaron tropas estadounidenses para sofocar la revolución obrera rusa, que era parte de una revolución mundial contra el mundo capitalista. En 1919 se formaron el Partido Comunista de los Estados Unidos y la Internacional Comunista en la Unión Soviética. En el mismo año, la jornada laboral de ocho horas se ganó en los EE. UU., donde una ola de huelga masiva arrasó el país provocando un susto rojo. En 1920, las redadas Palmer en los Estados Unidos deportaron a decenas de miles de trabajadores inmigrantes que se radicalizaron en las luchas de clases europeas y fueron acusados de unidad obrera y organización sindical. La masacre de Tulsa en 1921 fue probablemente un terror racista organizado por los capitalistas para dividir a los trabajadores blancos y negros (muchos veteranos de la Primera Guerra Mundial) y romper la ola de huelga del susto rojo.
El movimiento antirracista de hoy no debe verse solo como una lucha contra el terrorismo racista de los Estados Unidos. Debería verse como parte de una lucha de clases internacional contra el sistema mundial que oprime a todos los trabajadores no solo con racismo, pero también con sexismo, desigualdad y guerras interminables. La unidad blanca y negra de hoy en los EE. UU. Con el apoyo de este movimiento de millones de trabajadores en la mayoría de los países de todo el mundo da testimonio de su naturaleza de clase.
*****
- Information
- Imprimir
Recompensas rusas exponen debilidad de fascistas liberales
- Information
- 23 Julio 2020 95 visitas
Las acusaciones sobre que Rusia pago al Talibán para asesinar tropas estadounidenses en Afganistán, a lo que el gobierno aún no responde, es otra muestra de la decadencia del imperialismo estadounidense. La clase dominante estadounidense está en crisis; con una pandemia sin control, una completa depresión económica y la lucha masiva contra la policía racista. Sus instituciones se caen. Su liderato, demócrata y republicano, es incompetente y está divido.
Para la clase trabajadora internacional y el movimiento revolucionario comunista que debemos dirigir, el caos es tanto una oportunidad como un peligro. Por primera vez en muchos años, las masas de trabajadores buscan alternativas a este sistema de ganancias corrupto. Pero debemos también tener conciencia que se intensifica el terror estatal y la guerra inter-imperialista global está muy cerca.
Fascistas grandes y pequeños
Después de 18 años de combate estadounidense en Asia Central y el Medio Oriente, el abiertamente racista presidente Donald Trump presiono la retirada de tropas de focos de presión como Afganistán y Siria. Trump representa a los pequeños fascistas, quienes lucran específicamente de la energía y otros recursos domésticos. El ala de Trump esta, fundamentalmente, opuesta a los capitalistas imperialistas financieros; los liberales, grandes fascistas, quienes dependen del dominio sobre petróleo barato del Medio Oriente. Ambos lados están cansados de la “guerra eterna” en Afganistán – un conflicto, que, según el vocero principal de los patrones liberales, el New York Times, “tiene que terminar” (7/7).
Pero, no debemos confundirnos con este empuje hacia la “paz” de los grandes fascistas, a ellos no les importa derramar la sangre de los trabajadores. Los gobernantes liberales quieren conservar su ejército y su colateral político para la futura guerra entre súper poderes. Para ellos, el hecho que Trump no frenara la ascendencia de Rusia en la región es una debilidad estratégica. Conforme el capital financiero lucha para recuperar el control en las próximas elecciones, estas divisiones dentro de la clase dominante se podrían agudizar y hacerse más violentas.
Como trabajadores, no debemos hacernos ilusiones de que los ataques, contra Trump, de los grandes fascistas, serán buenos para nuestra clase. Estos capitalistas liberales representan el peligro más prominente para nuestra clase. Se apropian de las rebeliones masivas y las dirigen hacia las elecciones y por unas cuantas reformas insignificantes mientras construyen un movimiento dirigido por ellos mismos hacia un total fascismo y la tercera guerra mundial.
Para que los trabajadores podamos escapar de esta pesadilla, nuestra meta debe ser clara: la revolución comunista y la construcción de una sociedad igualitaria, dirigida por los trabajadores. El Partido Laboral Progresista Internacional (PLP) lucha para organizar las masas del mundo, desde Kabul a Moscú a Minneapolis, convertirnos en una fuerza armada de millones que pueda aplastar este sistema capitalista racista y sexista, para siempre.
Liberales atacan a Trump en su envestida hacia la guerra
Los grandes fascistas, principalmente representados por sus títeres en el partido demócrata y otros vendidos, no tardaron en reportar sobre las recompensas para desacreditar y disciplinar al presidente pícaro. Ellos saben que Trump, como buen payaso, autocomplaciente y degenerado que es, no puede manejar los intereses a largo plazo del imperio estadounidense.
Muchos líderes militares estadounidenses pasados, se han adherido al ataque. John R. Allen, quien dirigió las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en Afganistán durante la presidencia de Barack Obama, demostrando ser un buen títere de los grandes fascistas, golpeo a Trump y su gente con el reciente pacto de “paz” entre los súper sexistas criminales del Talibán y el golpeado y corrupto gobierno afgano:
De una administración que ha…abandonado a los kurdos en Siria y menoscabado a los palestinos, es difícil imaginar una estrategia de ataque estadounidense en Afganistán cuando el Talibán inevitablemente viola este acuerdo… (Brookings, 5/3).
Los grandes fascistas están desesperados por recuperar la presidencia para “enderezar el barco” del imperialismo estadounidense y prepararse para la guerra contra Rusia, China, o ambas. Aun cuando no tienen la disciplina interna necesaria para hacerlo, buscan restaurar algo de legitimidad a las instituciones legales y económicas capitalistas. Es por eso que los liberales vociferan contra las desigualdades racistas y sexistas en riqueza, salud, vivienda, empleo y encarcelamiento. Se dan cuenta que necesitan tomar una posición más agresiva para que sus rivales imperialistas no los aplasten.
En pocos días la treta de las recompensas se hizo pública, prominentes liberales como Nancy Pelosi, vocera de la cámara y Chuck Schumer líder de la minoría del senado demandaban información de los oficiales de inteligencia nacional a la vez que pedían nuevas sanciones contra Rusia (NYT, 1/7). Joe Biden, el imbécil segregacionista que los demócratas planean correr contra Trump, decía que, si es elegido, el presidente de Rusia Vladimir Putin “será confrontado e impondremos graves consecuencias sobre Rusia” (MSN, 28/6).
El presidente del Consejo en Relaciones Exteriores, Richard Haass, principal grupo de expertos de los grandes fascistas también proclamo en twitter: “Rusia lleva a cabo guerras encubiertas contra tropas estadounidenses en Afganistán y nuestra democracia en casa. Una respuesta proporcionada aumentaría los costos de su presencia militar en Ucrania y Siria, y, utilizando sanciones e informática, para desafiar a Putin en su casa” (27/6).
Con el orden mundial liberal y la supremacía estadounidense colapsando frente a nuestros ojos, los grandes fascistas se ven forzados a aumentar las embestidas – no por fortaleza, sino por debilidad.
El juego secreto imperialista de Rusia
Un ataque encubierto de inteligencia contra las fuerzas militares estadounidenses y británicas en Afganistán encajan bien con el criterio de guerra “hibrida” de Putin. El ejército ruso no está en condiciones para confrontar las fuerzas estadounidenses y de la OTAN, los patrones de su capitalismo de estado han mejorado sus habilidades desestabilizadoras y sus ataques cibernéticos, se han entrometido en elecciones foráneas, y han armado ejércitos colaboracionistas (RAND Corporation Report, 22/3/17).
Conforme afloran los detalles sobre las recompensas, también aflora evidencia que Rusia ha estado coqueteando con el Talibán y el gobierno central afgano, para tramar una salida más rápida de las tropas estadounidenses (CNN, 1/7). La disminuida presencia estadounidense en la región, dejará un vacío que servirá para los designios imperialistas de los patrones rusos. A finales de 1980, los imperialistas rusos fueron expulsados de Afganistán por los muyahidines, (Antecesores al Talibán, Al Qaeda, y el EI), apoyados por EE.UU. Los imperialistas rusos están ansiosos por que su vecino y toda Asia Central regresa a su órbita para una mejor seguridad regional, contratos militares lucrativos y acceso a la fortuna en recursos naturales (The Interpreter, 7/5).
¡Luchemos por el comunismo!
Cuando finalmente exploten las contradicciones de la rivalidad inter-imperialista, todos los patrones capitalistas de todas las naciones estarán ansiosos por enviar a los trabajadores a la guerra, a morir por sus ganancias. Como comunistas, nuestro objetivo revolucionario es ganar millones de trabajadores y estudiantes alrededor del mundo a unirse al Partido Laboral Progresista. Tenemos que aplastar el negocio genocida capitalista y luchar por el poder de la clase trabajadora internacional. Debemos entrelazar nuestras luchas contra el terror policial racista, el devastador desempleo, y la guerra imperialista, con una lucha unificada revolucionaria para acabar con todo este sistema podrido. El Partido Laboral Progresista representa las masas de la clase trabajadora, la única fuerza que puede acabar con el sistema de ganancias y toda la miseria en la faz de la tierra. ¡Únetenos!
CHICAGO, 27 de junio—docenas de mujeres y hombres negros, blancos y latinos de todas las edades cerraron las calles del lado oeste de la ciudad hoy. Las acciones audaces de estos luchadores antirracistas llegaron al punto más alto con una demostración al frente de la estación del Departamento de Policía de Chicago (CPD) del Distrito 10. Mientras más personas de unieron, los racistas asesinos de azul rápidamente se retiraron a la estación. El Partido Laboral Progresista (PLP) participo y ayudo a liderar, promoviendo la revolución comunista como la solución a todos los policías asesinos racistas.
La marcha fue liderada por amigos y familiares de Steve Rosenthal. Los policías racistas ejecutaron a este joven negro de 15 años de edad en el barrio de Lawndale de Chicago en agosto del 2018. Los policías racistas mentirosos naturalmente racionalizaron su asesinato violento, empezando con la mentira estándar de que “pensaron que tal vez tenía un arma.”
Después de perseguirlo hasta una escalera en la casa de su abuela, le dispararon en la parte trasera su cabeza. Declararon que fue “suicidio”. Lo llevaron a un hospital local, muerto cuando llego, pero no le permitieron a la familia ver su cuerpo. Hemos estado luchando por justicia para Steve desde entonces. Durante el primer mes de la muerte de Steve, se hicieron demostraciones casi diariamente.
Comunistas del PLP internacional luchan contra la injusticia junto con nuestras hermanas y hermanos de clase donde sea y cuando sea que los patrones atacan. Promovemos la idea que todo el sistema capitalista es la raíz de nuestra miseria colectiva y debe ser destruida. ¡Asesinatos racistas policiacos, pandemias, desempleo y deportaciones acabaran de existir cuando organicemos millones de nuestra clase en el PLP para aplastar el capitalismo con la revolución comunista!
Antiracistas se toman la calle, policías fascistas se retiran
Las rebeliones masivas a nivel mundial ocasionadas por los asesinatos racistas de George Floyd, Rayshard Brooks y Breonna Taylor inspiraron la energía renovada para luchar y marchar por Steve. Organizado mayormente por las redes sociales, pancartas y contactos personales, un grupo de algunas docenas de obreros multirraciales y jóvenes aparecieron al frente de la secundaria local del lado oeste que sirvió como punto de manifestación en marchas anteriores.
Rápidamente en nuestra marchar, nos tomamos calles principales al frente de la estación de policía donde los asesinos de Steve operaban y encontraron protección. Rápidamente una línea de policías salió a la calle y trataron de intimidar y dispersar el gentío. ¡Pero la ira de la familia, amigos y animadores no podría ser parada!
Rápidamente abucheamos los matones racistas, señalando que han pasado 22 meses y la familia aún tiene poca o casi nada de información de cómo conseguir justicia para su ser amado. Los policías se vieron forzados a retirarse mientras bloqueamos la calle al frente de la entrada de la estación.
Continuando la marcha por el barrio de la casa de Steve, sus amigos y familiares lideraron con coros, canciones y discursos. Algunos de los manifestantes eran jóvenes, igual que el hermano menor de Steve, pero aun así hablaron en el megáfono audazmente igual que un luchador con experiencia. El liderazgo que demostraron los obreros negros quienes organizaron una marcha militante y se enfrentaron a la policía fue poderoso. Augura bien para el futuro de luchas para derrocar el capitalismo.
Obreros acogen la línea comunista
Camaradas del PLP quienes han estado luchando junto con la familia de Steve desde su asesinato en el 2018, también ayudaron a dar liderazgo. Nuestros discursos retaron a políticos liberales, como la alcalde Lori Lightfoot, una mujer negra posando como una anti-racista, que apoya completamente la policía racista de Chicago.
Participantes también entonaron las consignas lideradas por el PLP:
“CPD, KKK-- ¿Cuántos niños asesinaron hoy?”
“CPD no se pueden esconder-- ¡los condenamos de genocidio!”
Distribuimos cientos de volantes del PLP y periódicos DESAFIO a los manifestantes y residentes de la clase obrera. Nuestros esfuerzos a largo plazo para construir una base en un barrio particular- manteniendo manifestaciones, marchas cenas del Primero de Mayo, y ventas del DESAFIO- han ayudado a darle la bienvenida a una fuerza luchadora antirracista en el área. Tenemos la intención de continuar profundizando estas relaciones y construyendo nuestra base para nuestro partido masivo.
No retiros del comunismo
El movimiento en contra de asesinatos racistas policiacos a nivel mundial ha llegado a un tope, y tenemos el potencial de hacer un papel vital en el presente. O abogamos audazmente por la revolución comunista como la única solución, o permitimos que liberales y liderzuelos diluyan la lucha como lo han hecho una y otra vez.
Para nosotros, la segunda opción definitivamente no se hará. El camino para darle justicia a Steve Rosenthal, George Floyd, Breonna Taylor y muchos otros toma forma en construir el PLP internacional. ¡Luchemos en contra del capitalismo racista- Luchemos por la revolución comunista!
- Information
- Imprimir
Liderazgo de obreros negros es clave para la revolución comunista internacional
- Information
- 23 Julio 2020 104 visitas
Los lectores del DESAFIO están conscientes de la insistencia del Partido Laboral Progresista que el centro de la de la lucha en contra al racismo y la lucha por la liberación de la clase obrera. La historia de este énfasis estratégico comunista revela la importancia del internacionalismo proletariado (eso es, la clase obrera) en ambas teoría y práctica.
Aunque el Partido Comunista de los Estados Unidos de América (PCUSA) se le acredita ampliamente (incluso los historiadores anticomunistas) con liderar la lucha en contra del racismo durante los años de la Depresión, durante la mayoría de la última década PCUSA – siguiendo la tradición del Partido Socialista de EE.UU. antes de la guerra – insistió que la opresión negra (en ese entonces llamada “la cuestión negra”) era exclusivamente un hecho económico. Énfasis indebido sobre la violencia, pobreza, y condiciones duras de trabajo desproporcionalmente sufrido por la clase obrera negra, se argumentó, aislaría los obreros blancos. Naturalmente la membrecía negra en PCUSA se mantuvo baja en los 1920s: para 1929, habían menos de 300 miembros negros en una membrecía total de más de 15,000 (Zumoff).
La ley contradictoria de la liberación negra
Fue la intervención del Comintern (la asociación mundial de partidos comunistas formada en 1919 después de la revolución bolchevique) que capacito al PCUSA a poner la lucha del racismo al frente y al centro. En el Sexto Congreso Mundial de 1928 de Comintern, había un debate intenso sobre la raza, clase y nación. (1) ¿Se deberían ver los obreros negros en EE.UU. como “gente” o “raza” o una “nación”? (2) ¿ Las divisiones de clase en la población negra hacían imposible el hablar sobre material de interés comúnmente compartido? (3) ¿El llamado de “determinación propia” de la gente y naciones oprimidas – una proposición clave de los escritos de Lenin y Stalin sobre la “cuestión nacional” – se refería a los obreros negros de EE.UU., y si, como? (4) ¿ Los obreros negros de EE.UU., por virtud de un grado más alto de opresión y explotación, particularmente posicionado para guiar la lucha global en contra del capitalismo?
Notablemente, comunistas negros de la delegación de EE.UU. al Sexto Congreso Mundial estaban – mientras fueron reclutados activamente para hacer un papel prominente en estos debates – ellos mismos divididos en estos temas (Haywood). Fueron mayormente delegados de otros países – especialmente de Japón, Finlandia, y URSS quienes presionaron por la posición que apoyaría la ley de PCUSA durante el periodo por venir (Solomon). Esta ley fue compleja y contradictoria.
Por una parte, acertaba que los negros campesinos, localizados mayormente en el “cinturón negro” del sur rural, constituían una nación oprimida en necesidad de determinación propia, comparable a la gente separada que se habían unido a formar URSS (Unión de Republicas Soviéticas Socialistas) después de la revolución bolchevique. Por otra parte, particularmente en el norte, la ley de Comintern llamaba por una lucha intensificada en contra del racismo en todos los esferos de la vida, expresado en el eslogan, “¡Negros y blancos, Unidos y luchando!”
El nacionalismo negro es una estrategia fallida
Se suponía que el Cinturón Negro – en lograr determinación propia por medio de la revolución “democrática burguesa” que le ayudaría a sobrepasar su desarrollo engendrado desigual capitalista- se unirían entonces a la clase obrera multirracial en el movimiento unificado revolucionario necesario para abolir el capitalismo.
Esta estrategia fue entonces y ahora tema de una critica seria. El llamado por una Republica Negra, mientras pretendía beneficiar la gente de la clase obrera de todas las razas y etnicidades, incluso en el tiempo lleno de nacionalismo y separatismo negro.
La historia después de la Segunda Guerra Mundial de los movimientos de liberación nacional premisa de determinación propia, además, ha mostrado que la teoría de revolución de dos etapas (primero la revolución democrática-burguesa, y después la revolución socialista) solo llevo a decepción y traición, particularmente en esas partes de Asia, África y Latinoamérica donde se acogió mas fervientemente.
El Partido Laboral Progresista acierta que las teorizaciones de principios del siglo veinte de la “cuestión nacional” aunque plausibles en su tiempo, han probado ser obstáculos envés de estímulos para la liberación de la clase obrera. Lo vemos como una falla desarrollada hasta hoy. Por eso es que el PLP lucha por nada menos que la unidad racial y una lucha internacional en contra del capitalismo. Tenemos un enemigo común y un mundo por ganar.
El comunismo combate el racismo
No obstante, en las secuelas de las luchas agudas tomadas en el Sexto Congreso Mundial, el CPUSA grandemente intensifico su compromiso en la lucha en contra del racismo. Enfocándose ambos en la opresión especial de los obreros no blancos y del impacto destructivo y divisivo del racismo sobre toda la clase obrera, CPUSA tomo el liderazgo en crear un movimiento de conciencia de clase multirracial, un legado que vive hasta hoy, especialmente en la base del PLP.
No hubiese habido la campaña de Scottsboro, no organización de aparceros, no sindicatos multirraciales, no protestas de evicciones masivas por todo USA sin los debates tomados en las reuniones del Comintern en el otro lado del mundo (Kelley; Naison). Además, donde el racismo (“chauvinismo blanco”) dentro del Partido mostro su horrible cara, se enfrentó de una, igual que en el así llamado juicio de Yokinen de 1931 (Hudson).
Una de mis patrañas historiografías favoritas anticomunistas es la afirmación de que el Comintern – a menudo igualado con una construcción demonizada designada como “Stalin” – nunca tuvo el interés de los obreros del mundo: que solo busco defender la URSS y sus círculos de patrones. La historia de la lucha sobre la “Cuestión Negra en los Estados Unidos muestra completamente lo opuesto.
De hecho, cualquiera de sus limitaciones nacionalistas vistas retrospectivamente, fueron los comunistas alrededor del mundo con su intervención quienes ayudaron a los comunistas en EE.UU. a reestablecer sus prioridades. Por este gesto de internacionalismo proletario revolucionarios antirracistas continúan endeudados hasta este día.
Obreros negros la clave
El PLP internacional comunista está luchando por la idea de que los patrones y políticos liberales son el peligro principal y el fascismo se está exponiendo mas agudamente ahora en las luchas dentro de la clase patronal de cómo se alinearan a sí mismos o responderán a la realidad del declive del imperialismo en EE.UU.
También luchamos por la idea del liderazgo de los obreros negros es la clase única para la victoria global del comunismo. Únete a la lucha.
Más lectura:
Haywood, Harry. Black Bolshevik: Autobiography of an Afro-American Communist.
Hudson, Hosea. The Narrative of Hosea Hudson: The Life and Times of a Black Radical.
Kelley, Robin D.G. Hammer and Hoe: Alabama Communists during the Depression.
Naison, Mark. Communists in Harlem during the Depression.
Solomon, Mark. The Cry Was Unity: Communists and African Americans, 1917-1936.
Zumoff, Jacob. The Communist International and U.S. Communism, 1919 – 1929.