Construir una base fundamental para la lucha y la moral
Somos miembros del Partido Laborista Progresista (PLP) que nos hemos estado organizando con un colectivo de estudiantes, personal y profesores de la City University of New York (CUNY). Durante la pandemia en curso, hemos tenido algunos éxitos modestos al ayudar a liderar la campaña para construir la preparación para la huelga contra la austeridad racista. Esto incluye una serie de caravanas militantes a las casas de los presidentes de CUNY, marchas por la comunidad, charlas y charlas, ventas de DESAFÍO y grupos de estudio. También participamos activamente en un colectivo de miembros sindicales de base que están abiertos a nuestras ideas y están de acuerdo en que los estudiantes son el elemento clave en la construcción de esta lucha.
Este semestre ha comenzado relativamente lento para nosotros. Ha sido difícil lograr que los estudiantes asistan a eventos y, a veces, nuestras reuniones de Zoom, generalmente sólidas, han terminado siendo pequeñas y algo discretas. Siempre tenemos grandes planes, convocamos eventos masivos y somos buenos para ser audaces, pero después de algunas reuniones a las que no asistieron mucho, nos preguntamos si este semestre podría ser uno en el que simplemente no podamos poner las cosas en marcha.
¡La subjetividad es el enemigo! Ese sentimiento de que “las cosas no van a mi manera”, de que nuestra propia visión de las cosas es lo que debe guiar nuestras acciones, son errores fatales en la lucha de clases. El poder del colectivo es mucho más fuerte que la subjetividad. A través de discusiones con otros miembros de nuestra organización de masas e insistiendo en que sigamos intentándolo, las últimas semanas vimos que nuestra perseverancia dio sus frutos. Tuvimos un excelente grupo de estudio de estudiantes con algunos de nuestros estudiantes en el que discutimos muchas cuestiones políticas importantes, incluida la cuestión clave de cómo podemos llegar a más personas con las ideas del PLP. Tuvimos una reunión estudiantil muy concurrida y ayudamos a dirigir un discurso de estudiantes en el campus hace dos semanas contra la desorganización racista de CUNY. ¡El discurso estuvo bien organizado, tuvo cobertura de primera plana en un periódico local y nos animó a todos a seguir luchando!
Hay lecciones importantes que podemos aprender de las masas de estudiantes y trabajadores, si estamos abiertos a ellas. En este período hemos aprendido que confiar en nuestra base es clave, ellos fueron los que nos impulsaron a realizar estos eventos. También aprendimos que nuestra seriedad y dedicación genera confianza en nosotros como organizadores y en el PLP como Partido que puede llevar a los trabajadores a nuestra victoria final. Aprendimos que tenemos que seguir avanzando, reuniéndonos, planificando, luchando... e incluso en lo que pueden parecer tiempos difíciles, ¡seguir adelante!
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Huelga de Alabama revela corrupción capitalista
Después de visitar a los mineros de Alabama y permanecer en contacto con ellos durante el último mes y medio, nuestro club ha podido contactar a mineros de otros países para conectarse con ellos y apoyarlos. ¡Se acercan algunas actividades! Una, será celebrar el Día de la Revolución Bolchevique el 6 de noviembre en Brighton Beach. Venderemos algo de licor y comida para recaudar fondos y apoyar a los mineros en huelga en Alabama.
Nuestro segundo objetivo es organizar una conferencia internacional el 20 de noviembre para estudiar la historia de la minería, y aprender de la experiencia de los mineros. Estos dos eventos nos prepararán para un proyecto de invierno en Alabama el 20 de diciembre, donde apoyaremos la huelga, colaboraremos en una colecta de juguetes y continuaremos construyendo comunidad con los mineros. BlackRock es el administrador de activos más grande del mundo y el banco en la sombra más grande. Aparte de Alabama, esta multinacional está involucrada en la explotación de trabajadores mineros en países de América del Sur y África. Al mismo tiempo, esta corporación alimenta la guerra y la muerte en todo el mundo al invertir en fabricantes de armas, contratistas militares y fabricantes de armas de fuego para civiles en los EE. UU., Afganistán y Oriente Medio. Nosotros, como club del partido, pensamos que es importante construir el internacionalismo y establecer las conexiones que una lucha tiene con la otra. El mundo está dirigido por unas pocas empresas que controlan el dinero y los recursos y deciden el futuro de la clase trabajadora. Nuestra misión es revelar a estos capitalistas que crean la guerra y la destrucción en todo el mundo y construir solidaridad entre nosotros para que podamos derrocar al imperialismo dentro y fuera de los EE. UU. Esperamos que pueda separar estas fechas en su calendario y unirse a nosotros para los eventos. ¡Serán divertidos!
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Los jóvenes comunistas aprenden del liderazgo en acción
Recientemente asistí a mi primera escuela de cuadros del Partido, que dirigí junto con otros cuatro miembros del Partido Laborista Progresista (PLP). Siendo un miembro nuevo y joven del PLP, la tarea me intimidó cuando me ofrecieron por primera vez. Sin embargo, fue una experiencia valiosa en muchos sentidos. En los meses previos, coordiné reuniones de planificación con mis compañeros y poco a poco construimos nuestra visión para el evento. Hasta el día del evento, solo nos habíamos reunido y discutido virtualmente, lo que ayudó en términos de ver todas las notas de planificación, pero carecía de la misma energía que las reuniones en persona.
Nuestra escuela de cuadros compensó completamente el tiempo de separación. Con uno de nuestros líderes de discusión fuera del estado, dirigimos discusiones virtuales y en vivo basadas en el tema Comunismo: pasado, presente y futuro. Aproximadamente 40 camaradas y amigos del partido participaron en las discusiones y reflexionaron sobre la distinción entre el comunismo y el capitalismo y el socialismo. Dos de nuestros compañeros, que son trabajadores de Metro, terminaron nuestro evento con una discusión sobre un sistema de transporte ideal. Un camarada de Nueva York señaló las tácticas de la clase dominante para dividir a los trabajadores por las inseguridades financieras de la tarifa del transporte.
Un camarada mayor, que me presentó al Partido, nos elogió a mí y a nuestro compañero camarada que dirigía virtualmente. A pesar de los problemas técnicos y el tiempo, logramos facilitar conversaciones interesantes y usar nuestro tiempo para analizar los defectos del antiguo comunismo y nuestras propias acciones para luchar contra el sistema opresivo del capitalismo.
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Kroch
No conocía al profesor Kroch, ni la historia de su relación con el Partido. Sin embargo, me sorprendió ver en el obituario que apareció en este periódico local de Filadelfia que era miembro del PLP. Cualquiera que sea su historia, debe haber estado muy orgulloso de haber sido miembro del Partido para que se haga una mención en el periódico local.
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Editorial: El racismo de EE. UU. impulsa la crisis de los migrantes en Haití
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- 09 Octubre 2021 135 visitas
Después de que más de 10,000 haitianos arriesgaron sus vidas viajando entre la selva, territorio infestado en pandillas para llegar a la frontera con Texas, fueron recibidos con una ola de terror racista. En un retroceso a los caza esclavos del siglo 18, los agentes de patrulla fronteriza de EE.UU., montados a caballo, los lapidaron y secuestraron inmigrantes desesperados- hombres, mujeres y niños. Pero esta demostración inhumanidad no fue nada nuevo. Fue parte de una larga tradición de atrocidades liberales hacia inmigrantes y obreros negros. En Estados Unidos racista, gobernantes demócratas y republicanos igual usan el racismo para dividir, explotar, encañonar, y demonizar los obreros más vulnerables.
Después de que el Presidente Joe Biden hizo campaña el año pasado para señalar la “crisis humanitaria en nuestra frontera creada por Trump” y de parar “de negar asilo a la gente escapándose de la persecución y la violencia” (joebiden.com), muchos fueron engañados a pensar que su administración sería un cambio del racista abierto de Donald Trump, y que le daría la bienvenida a los inmigrantes con los brazos abiertos. La realidad expone la falacia del “menos malo” pensamiento soñador – y el hecho que los liberales son el peligro principal para la clase obrera internacional. De hecho, Biden está siguiendo el mismo manual de estrategias usado por Trump y la pesadilla de Biden predecesor demócrata, deportador a cargo Barack Obama. Como Trump, Biden esta cínicamente explotando la pandemia del Covid-19 y usando el “titulo 42” para autorizar los lazos de los agentes fronterizos nazis a negar su “derecho” de asilo. Como Obama, él ha estado expulsando a migrantes en masa- más de 900,000 desde Febrero (BuzzFeed, 9/23).
El Partido Laboral Progresista combate estas expulsiones racistas y se pone en solidaridad con los obreros quienes están huyendo de la inestabilidad y destrucción causada por el capitalismo. La clase obrera internacional debe rechazar todas las formas de nacionalismo y fronteras. La lucha para destruir el capitalismo y explotación imperialista debe ser liderada por obreros negros bajo la pancarta del Partido Laboral Progresista revolucionario comunista.
El racismo de los patrones lleva a migraciones desesperas en masa
El anti-inmigrante y racismo anti-negro son esenciales para los patrones capitalistas. Desde el terremoto devastador del 2010, los patrones haitianos se han amangualado con los imperialistas de EE.UU. y otros ladrones en robarse cientos de millones de dólares en “desarrollos” de negocios mientras dejan los obreros de Haití peor que nunca. Esto, en turno, ha llevado a la última migración masiva fuera de Haití (Current Affairs, Noviembre 2016).
En Brasil, los patrones súper-explotaron estos obreros inmigrantes para construir estadios para la Copa Mundial del 2014 (Reuters, julio 2014). En Chile, encararon super-explotacion racista y pobreza terrible; en Venezuela, el colapso de la economía del estado capitalista. Yendo al norte para EE.UU. manteniendo los inmigrantes parados en México mientras esperan indefinidamente para que sus reclamos de asilo sean procesados en EE.UU.
Abusados, humillados y rechazados, estos refugiados continuaron en la caldera al fuego: a los Estados Unidos, con su horrífica historia de brutalizar a inmigrantes en general y obreros de Haití en particular.
De Carter a Clinton: encerramiento racista
Ex presidentes de EE.UU. Jimmy Carter y Ronald Reagan trabajaron mano a mano con la dictadura archí-criminal Duvalier. Deportaron los busca asilos de vuelta a Haití, mandando muchos a su tortura o muerte.
En 1991, después de que el presidente haitiano Jean-Bertrand Aristide lo sacaron por un golpe de estado, miles de obreros fueron interceptados por guardacostas de EE.UU. y enjaulados en un campamento sobre poblado en Guantanamo Bay, Cuba, a esperar que los procesen. Después el presidente George H.W. Bush ordeno a los guardacostas de volver los barcos directamente a Haití- una ley denunciada como cruel por Bill Clinton en su campaña presidencial de 1992. También continúo utilizando Guantánamo Bay para las detenciones racistas de cientos de refugiados de Haití. Su administración justifico esta detención racista declarando que eran portadores del virus del VIH, incluso si la tasa de transmisión del virus del VIH era más baja en Haití que en EE.UU. (refugees.org, Septiembre 2021).
Obama a Biden: ataque continuo racista
Bajo la administración de Obama, La Secretaria de Estado Hillary Clinton se enfocó en crear un clima favorable de negocios en Haití. En el nombre del “comercio libre”, la embajada de EE.UU. entro en un esfuerzo conjunto con elites haitianas, propietarios de fábricas, y compañías grandes de textiles en EE.UU. para poner el salario mínimo en Haití a 31 centavos por hora (COHA.org, 7/11).
Después del terremoto del 2010, la cara del esfuerzo de alivio internacional fue el “enviado especial” de la Naciones Unidas Bill Clinton, que canalizo los esfuerzos de “alivio” de atraer inversiones extrajeras y ganancias. En ese entonces, Puerto Príncipe quedo en ruinas. Los obreros haitianos los amontonaron en ciudades atiborradas de carpas, donde cientos murieron de la epidemia del cólera, des cadenados por los “pacifistas” de las Naciones Unidas (pri.org, 10/27/20). Como noto Current Affairs (11/2/16), “la recuperación guiada por Clinton fue un desastre.”
Poco después de que Obama se fue de la presidencia, El Departamento de Seguridad Nacional arreo a miles de refugiados: “las instalaciones de inmigración se han llenado tanto que cientos de inmigrantes los han movido a cárceles criminales, en violación de normas internacionales” (Miami New Times, 12/14/16). La solución de Obama fue de apresurar las deportaciones a un país en ruinas del Huracán Matthew y agitada por “inquietud violenta después de las elecciones” (Miami New Times).
Comunismo = no fronteras
En la cara de ataques incesantes por Biden y otros patrones capitalistas, los refugiados de Haití organizo caravanas de migrantes para protegerse de la policía y pandillas, y de cuidarse el uno al otro a lo mejor posible. Como usual, la clase obrera internacional ha salido en apoyo, con manifestaciones en solidaridad por todo el mundo. En la frontera de EE.UU.-México, los obreros de México cocinaron con refugiados tomando refugio bajo un puente en Del Rio, Texas (México Daily News, 9/27). En el lado de EE.UU., organizaciones comunistas han recaudado dinero para ellos.
Mientras esta crisis fronteriza continua, debemos luchar por no deportaciones – y para construir un partido comunista revolucionario. Las fronteras fueron creadas por el capitalismo para definir cuales obreros eran los suyos para explotar. ¡Pero los obreros no tienen fronteras! Debemos luchar por el comunismo para crear un mundo sin naciones o explotación. Una clase, un mundo, un partido. ¡Únete al PLP!
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El mejor armador de un equipo de voleibol: LUCHAR CONTRA EL RACISMO
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- 09 Octubre 2021 167 visitas
BROOKLYN, NY, 6 de octubre—¿Qué significa ganar para antirracistas dentro de los deportes competitivos en una sociedad racista? Esa es la gran pregunta en una lucha que involucra a entrenadores, jugadores, maestros y padres, entre ellos militantes del Partido Laboral Progresista, en el programa deportivo de la nueva e integrada escuela John Jay y Millenmium High School.
Bajo el capitalismo, un sistema que se alimenta de desigualdad y aplausos al individualismo, ganar juegos contra equipos rivales es todo en los deportes. Pero los comunistas vemos el ganar de manera diferente. Nuestras victorias se definen por el antirracismo y la colectividad. Nosotros ganamos al ganar a la gente a valorar las necesidades a largo plazo del grupo sobre los logros individuales.
En John Jay Millennium, las jugadoras y entrenadoras del equipo femenil de volibol tienen la importante responsabilidad de ayudar a dirigir e integrar la escuela en su transición de dos equipos en uno - uno donde sus jugadoras son en su mayoría negras y latinas, en el otro son jugadoras blancas y asiáticas. Este programa tiene una orgullosa historia de lucha contra el trato racista de jugadoras negras y latinas por parte de los policías escolares sin control. También ha denunciado las desigualdades racistas en financiamiento en el departamento de atletismo de la secretaria de educación.
¿Cómo se distingue la lucha antirracista en un equipo deportivo?
Audiciones para el equipo de volibol empezaron en agosto, poco antes del comienzo del año escolar. La mayoría de las jóvenes que se presentaban eran de la escuela de elite Millennium Manhattan, la cual anteriormente había compartido un programa deportivo con La Escuela Brooklyn Millennium en John Jay. Cuando fue claro que las estudiantes negras y latinas de John Jay no tendrían muchas posiciones para audicionar, era necesario poner al frente el antirracismo.
Aunque las pruebas se extendieron hasta las primeras semanas del año escolar, para dar mas oportunidad a estudiantes de otras escuelas John Jay, los entrenadores condujeron las audiciones como lo hicieran en años anteriores. Jugadoras menos experimentadas fueron enviadas a otro gimnasio dentro del edificio, con la intención de proveer apoyo para mejorar sus posibilidades de entrar al equipo. Pero en este caso, el resultado fue que la mayoría de las atletas negras y latinas fueron enviadas al segundo gimnasio, mientras que la entrenadora principal se quedaba en el primer gimnasio con las atletas, mayormente, blancas y asiáticas. Muchas de estas estudiantes obtuvieron su ventaja sobre las otras estudiantes porque jugaron en equipos de volibol en clubs privados el año anterior, cuando los equipos de las escuelas publicas fueron cerrados debido a la pandemia. Los clubs de volibol son costosos, hasta $10,000 por jugadora, además de gastos de transporte – a lo que la mayoría de la juventud negra y latina no tiene acceso.
Es decir, se necesitaba una vigorosa lucha para discutir y actuar sobre la importancia de unir los dos programas para crear un equipo antirracista integrado. Algunas jugadoras negras señalaron que las desigualdades racistas se notaban en las audiciones, lo cual condujo a una aguda lucha. ¿Qué significa tener un equipo ganador? ¿Deberían recibir mas tiempo de juego las jugadoras mas experimentadas, dando mas oportunidad al equipo de ganar? O ¿el equipo debería, consistentemente, permitir en la cancha a jugadoras experimentadas y no experimentadas juntas, para avanzar la integración, unidad y el desarrollo de todo el equipo?
La lucha continua – a un nivel mas alto/Luchar para convertir la integración antirracista en primaria sobre ganar
Nos enfrentamos a una sociedad segregada e inherentemente desigual y un sistema de educación publica. Este sistema no es un accidente. El capitalismo necesita el racismo para sobrevivir. Necesita dividir a estudiantes blancos de estudiantes negros y latinos para que todos puedan ser oprimidos y explotados por ganancias.
Construyendo un equipo integrado antirracista dentro y fuera de la cancha es como podemos comenzar a romper las divisiones racistas que el DOE nos entrena a aceptar como normales. Desde que las jugadoras negras comenzaron esta lucha, el equipo de volibol ha tenido múltiples discusiones sobre que el antirracismo deberá estar al centro de todo, junto a la construcción de la unidad del equipo. Estas reuniones continuaran en las próximas semanas. Son el centro de lo que nos enorgullecerá cuando miremos atrás a esta temporada deportiva, John Jay gane o no el campeonato.
Por primera vez, se pide a las jugadoras que evalúen al equipo políticamente, además de atléticamente. Se les anima a dar sugerencias sobre estrategias especificas para hacer que el equipo sea mas equitativo. El liderato de las jóvenes negras – quienes son mas brutalmente atacadas por este sistema racista – es clave en este proceso. Un equipo verdaderamente integrado, con las jugadoras mas o menos experimentadas compartiendo la cancha, ocurre mas consistentemente. Aunque menos jugadoras negras audicionaron para el equipo debido a los requerimientos de vacunación y las dudas de las familias negras en vacunarse, el equipo tiene un numero igual de jugadoras negras y latinas como blancas y asiáticas. Cuando practiquen el volibol, también estarán practicando antirracismo y unidad multirracial.
Historia de equipos deportivos segregados
El plantel John Jay, una escuela históricamente negra y latina, en el corazón de un barrio afluente y blanco en Brooklyn, es el modelo de la desigualdad racista capitalista. Tiene tres escuelas que inscribe estudiantes predominantemente negros y latinos de familias de escasos recursos que viven fuera del barrio, y una cuarta escuela Millennium Brooklyn, una escuela selectiva, significativamente blanca que recibe mas financiamiento y recursos por estudiante que las otras tres.
Las desigualdades racistas en el acceso a los deportes eran increíblemente obvias, y parte del paquete segregado de un acuerdo forzado por los alcaldes Bloomberg y de Blasio. El programa deportivo del plantel John Jay abarcaba a 1,859 estudiantes, mas del 90% de ellos negros y latinos, a los cuales se les dio nueve equipos. Pero el programa de Millennium recibió 17 equipos con solo 1,261 estudiantes, mas o menos la mitad de ellos eran de Millennium High School en Manhattan, la cual utiliza los gimnasios de John Jay y solo tiene el 25% de estudiantes negros y latinos.
Como parte de la lucha a largo plazo por integrar los programas y dar a los estudiantes negros y latinos su parte comparativa de recursos, el PLP se unió a otros en el diseño de una volante antirracista que sacudió el estatus quo racista. Después del asesinato de George Floyd y las protestas masivas que le siguieron, el asqueroso racismo de DOE era muy vergonzoso hasta para los sinvergüenzas patrones escolares. Los dos equipos fueron integrados – una gran victoria. Pero el verdadero trabajo para construir la integración antirracista apenas comienza.
Par los atletas, entrenadores, maestros y padres, la verdadera victoria llega cada vez que nos enfrentamos a la clase dominante racista. El racismo no se va a acabar mientras continúe el capitalismo. Solo bajo el comunismo, una sociedad donde toda la clase trabajadora trabaje junta para el beneficio de todos, el racismo podrá ser destruido.
Mientras tanto, todos los estudiantes y trabajadores necesitan estar preparados a tomar acción una y otra vez. Si nosotros podemos hacer que la meta mas importante para los estudiantes, padres y personal, sea hacer la integración antirracista en los deportes, estaremos mas cerca de la construcción de conciencia de clase, y mas cerca de aplastar el capitalismo.
¡Manténganse sintonizados!
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Historia Obrera - John Brown, Harriet Tubman: modelo para la lucha multirracial
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- 09 Octubre 2021 179 visitas
El plan del abolicionista John Brown en la redada de Harpers Ferry era apoderarse de las armas en el arsenal alli y comenzar a armar a los trabajadores esclavizados quien lideraría una rebelión a gran escala contra la esclavitud.
El próximo 17 de octubre marca el aniversario 162 de la redada en Harper’s Ferry por el abolicionista John Brown. Fue una revuelta revolucionaria mostrando la necesidad de una lucha militante, antirracista, multirracial, y revolucionaria.
Década de 1850: La clase capitalista estadounidense violentamente se divide
El escenario de la redada de John Brown es EE.UU. en los 1850, con facciones opuestas de la clase capitalista estadounidense peleando entre si. Para los esclavistas sureños, la recolección de algodón dependía de la esclavización de trabajadores negros, aun si eso significaba secesión y la construcción de su propio país. Los capitalistas sureños domininaban sobre el poder estatal estadounidense, por décadas habían controlado la Suprema Corte y la presidencia. La lógica del infame caso Dred Scott en la Suprema Corte en 1857 dio luz verde para la expansión de la esclavitud y en 1859, John Brown dirigió su redada multirracial a un arsenal en Harper’s Ferry, Virginia.
Los dueños de plantaciones sureños de EE.UU. estaban aterrorizados por la redada de John Brown, por su unidad multirracial y militancia, una verdadera refutación contra su estereotipo racista. Uno de los cinco luchadores libertarios negros, Osborne Anderson, describió la atmosfera antes de la redada:
“Me han permitido darme cuenta, por completo, la armonía moral, mental, física, social de una familia anti-esclavista, llevando a cabo, por completo, el principio de la causa anti-esclavista. En la casa de John Brown, y en la presencia de John Brown, hombres de diferentes partes del continente se reunieron y unieron en una compañía, donde no se percibe el odioso prejuicio – ningún fantasma de distinción encontró espacio para entrar”.
Desde la niñez, John Brown juro luchar contra la esclavitud
Esta confianza entre trabajadores negros y blancos no ocurrió de la noche a la mañana. El padre de John Brown fue el “conductor” del Underground Railroad [Tren Clandestino] en Ohio. A la edad de 12, Brown conoció a un niño esclavizado fugitivo y vio el sufrimiento que la esclavitud le había causado, eso lo marco para siempre. Brown creía que negros y blancos eran completamente iguales. Y puso en practica este conocimiento diariamente.
De adulto, Brown mudo a su familia a una granja en North Elba, NY, cerca de la comunidad negra de trabajadores anteriormente esclavizados. Muchos de ellos eran invitados regularmente a cenar a casa de la familia Brown. Los abordaba como Sr. o Sra., en contraste con las costumbres racistas de la era (aun entre muchos opositores a la esclavitud).
En preparación para la redada, Brown reunió a abolicionistas negros y blancos. En abril de 1858, mientras colectaban dinero, armas y voluntarios en Canadá, visito a Harriet Tubman. Ella era bien conocida en la comunidad de esclavos fugitivos negros, ya que los había guiado personalmente a la libertad. Tubman apoyo sus planes, pidiéndole que la fecha de la redada fuera el 4 de julio de 1858, prometiendo llevar a voluntarios. Acordaron comunicarse a través de su amigo mutuo, Frederick Douglas, un abolicionista negro antes trabajador esclavizado.
Tubman: Libertadora de 300 trabajadores esclavizados
Las propias experiencias de Tubman la acerco a Brown. Nacida alrededor de 1820 de padres esclavizados en una plantación en Maryland, Tubman hacia trabajo de casa y campo, era abusada físicamente y con llanto en los ojos vio a muchos de sus nueve hermanos vendidos a otras familias. Durante su adolescencia, Tubman sufrió de un cráneo roto debido a la vida brutal en la plantación. Su “dueño” trato de venderla como “producto dañado”. Así que huyo, caminando por varias semanas, casi siempre de noche, unas 90 millas hasta llegar a Philadephia, a través del Tren Clandestino. Poco después regreso, sacando a su familia de la esclavitud hacia Canadá. Y eso solo fue el comienzo.
Por once años, y un precio sobre su cabeza, Tubman hizo trece viajes al sur y guio aproximadamente 300 esclavos a la libertad en Canadá. Apoyo las luchas armadas de Brown en Kansas contra las pandillas pro esclavitud. Brown a su vez, conocía la valentía, militancia y conocimiento del terreno y de las redes del Tren Clandestino de Tubman, sabia que Tubman seria invaluable en sus planes de liberar a los esclavos a como diera lugar. Le llamaba “General Tubman”. Ambos creían en acción directa y violencia armada para acabar con la esclavitud.
Tubman se enfermo y no pudo llevar sus fuerzas a Harper’s Ferry, pero su trabajo inspiroal resto de los rebeldes. El ejemplo de Tubman, así como de Osborne Anderson y los otros rebeldes, desacredito la imagen de la gente negra como victimas pasivas, aterrorizando a esclavistas y políticos sureños e inspirando el movimiento abolicionista.
Esclavistas petrificados por rebeliones Negras
Como todas las formas de una sociedad de clases, la esclavitud era llevada a cabo con la violencia de la clase gobernante. Pero para quienes dicen que los trabajadores no pelearan contra la opresión, los hechos de la historia nos muestran que la lucha es universal.
La rebelión armada en 1831 de Nat Turner catapulto la abolición como una demanda inmediata. Los abolicionistas como Harriet Tubman, Frederick Douglas, John Brown, Sojourner Truth, William Lloyd Garrison y muchos otros, se unieron a esta lucha. La ley de Esclavos Fugitivos de 1850 amplio el alcance de los esclavistas hacia el norte, para capturar a los escapados de la esclavitud, pero los abolicionistas muchas veces atacaban a estos captores, a veces liberando a los fugitivos. Frederick Douglas dijo, “La única manera de convertir en carta muerta la ley de Esclavos Fugitivos es hacer muertos a una docena o mas captores”.
Los esclavistas, aunque hablaban de negros “dóciles” sabían bien lo que ocurría. Estaban con miedo del potencial de los rebeldes negros y de los “agitadores foráneos”. Patrullaban toda la noche con perros y armados, para intimidar a sus trabajadores esclavos y para que no recibieran la literatura abolicionista.
Brown y Tubman demostraron que las ideas racistas y nacionalistas no se pueden sobreponer simplemente dentro de nuestra cabeza. Se necesita un cambio material en la forma en que uno vive. Entre los abolicionistas militantes negros y blancos, se desarrollo la unidad multirracial durante años de trabajar juntos, conociéndose mientras luchaban con sus diferencias.
Violencia masiva revolucionaria
Invitamos a todos los trabajadores, soldados y estudiantes a participar en la lucha antirracista, a unirse al Partido Laboral Progresista. El PLP esta parado sobre los hombros de Brown, Tubman, Douglas y las masas de trabajadores que apoyaron la redada de Brown y al Tren Clandestino. Sin embargo, estos antirracistas y su política, tenían sus limites.
John Brown analizo correctamente que solo la acción directa y violenta podría acabar la esclavitud – y la noche de su ejecución, admitió que subestimo la violencia necesaria para acabar la esclavitud. El PLP aplaude la implacable violencia demostrada por Brown hacia los racistas dueños de plantaciones y los secuestradores, pero rechaza la guerra de guerrillas a corta escala. Nosotros luchamos por un movimiento militante masivo comunista, cuyos soldados serán trabajadores de fabricas y del campo. La revolución comunista significa que millones de nosotros – eventualmente todos nosotros – debemos convertirnos en organizadores comunistas en nuestros trabajos, universidades, barracas, y organizaciones de masas.
La violencia de masas es lo opuesto de la de John Brown, la cual era basada en la religión y el martirologio individual. La historia nos ha mostrado que cuando las masas de trabajadores se han parado y luchado son invencibles. La violencia de masas significa que millones de trabajadores están organizados y armados con las ideas comunistas primero. Significa luchar para ganar a trabajadores a la filosofía del materialismo dialectico y analizar al mundo desde la perspectiva de la lucha de clases y la destrucción del racismo con la revolución comunista por la dictadura de los trabajadores.
La tarea histórica de la clase trabajadora es derrocar el capitalismo. La violencia no se puede evitar. Sin embargo, esto no significa insistir en la muerte o un “suicidio revolucionario” individualista, sino organizar y preservar nuestras fuerzas para continuar la lucha.
¡Únete al PLP!
Hoy, nuevamente existe una división en la clase gobernante estadounidense, pero la situación mundial es muy diferente. El imperialismo estadounidense esta en declive, mientras que los imperialistas chinos y rusos son mas asertivos. Los grandes fascistas, la sección imperialista de la clase gobernante estadounidense no tienen un Lincoln que una sus facciones capitalistas, solo un endeble Joe Biden. Los grandes fascistas quieren crear el fascismo liberal con la excusa de salvar la democracia que nunca ha existido, quieren construir para la guerra contra China o Rusia. Mientras que los pequeños fascistas, han desatado a ego-maniáticos como Donald Trump, quienes quieren una aislacionista “Fortress America” [
Ambas facciones capitalistas significan mas racismo, sexismo y ataques abiertamente fascistas a la clase trabajadora internacional. El PLP lucha por seguir el ejemplo de John Brown y Harriet Tubman y dirigir a la clase trabajadora hacia una revolución, donde los trabajadores dirijan el mundo, sin patrones racistas ni su sistema de ganancias. ¡Únetenos!
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El imperialismo desplazó a los trabajadores, aplastar todas las fronteras
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- 09 Octubre 2021 155 visitas
Las caravanas de inmigrantes que se dirigen a Estados Unidos y que son noticia son el resultado del fracaso del capitalismo y el imperialismo. Esto no solo es cierto en el caso de la migración a los EE. UU .: los trabajadores de todo el mundo abandonan sus hogares en busca de seguridad frente a la guerra, el hambre, los desastres climáticos y la violencia, y por una vida digna para ellos y sus familias.
Desde hace muchas décadas, los migrantes del Caribe y América Central se han trasladado a Estados Unidos y otros países del hemisferio occidental. Tan pronto como los trabajadores migrantes están en movimiento, los patrones y sus medios comienzan a demonizarlos. Los migrantes son etiquetados como “parásitos, perezosos, ladrones de empleo y portadores de enfermedades” como si no prefirieran quedarse en sus países de origen para construir sus vidas.
Hoy en día, la mayoría de los migrantes que llegan a la frontera sur de Estados Unidos son de América Central y América Latina, pero muchos también son de Haití. Decenas de miles están viajando por América Latina en busca de seguridad. Las imágenes provenientes de esa frontera son una advertencia a los migrantes del terror fascista que les espera: agentes fronterizos a caballo y azotando a los migrantes haitianos como los viejos cazadores de esclavos en Sainte Domingue (lo que los esclavistas franceses llamaban Haití). Junto con fotos de trabajadores de Centroamérica y sus familias en campos de concentración.
Históricamente, la clase dominante europea envió libremente a sus representantes por todo el mundo para invadir y establecer colonias y esclavitud como modelos económicos. En el llamado Nuevo Mundo, los colonizadores atacaron a la población indígena con asesinatos, enfermedades y violaciones. Robaron tierras y riquezas y obligaron a algunos de ellos a la esclavitud. Más tarde, los colonialistas trajeron trabajadores negros de África para esclavizarlos. Cada grupo de trabajadores oprimidos resistió a su vez. A medida que pasaba el tiempo y la economía maduraba, los patrones necesitaban idear una nueva forma de esclavitud para aprovechar la industrialización. Nació la esclavitud salarial. Hoy todos los países son capitalistas.
El impacto del imperialismo ha sido intenso: racismo y sexismo, efectos devastadores de desastres “naturales”, desempleo, inestabilidad política e infraestructura deficiente. Durante casi dos siglos, los países de América Latina han estado bajo el dominio imperialista estadounidense. La Doctrina Monroe de 1823 prohibió que cualquier otra potencia interviniera en este hemisferio. En Haití, esto ha significado que Estados Unidos haya tenido la libertad de invadir en 1915, 1994 y 2004 colocando títeres en el poder y fomentando golpes de Estado cuando sus intereses estaban en peligro. Esta política se ha aplicado en toda América Latina.
Los trabajadores migrantes no crearon las condiciones que los obligaron a mudarse, sino el capitalismo. Sin embargo, nada permanece igual, el cambio es inevitable pero cómo cambien las cosas depende de nosotros. Lo que hacemos cuenta: luchar contra el racismo antiinmigrante con expresiones de solidaridad en cualquier frontera, organizarnos en el trabajo, en el ejército y en nuestros barrios. Pero debemos usar estas luchas para construir y reclutar al Partido Laboral Progresista comunista internacional.
Llegará un momento en que la esclavitud, ya sea de bienes muebles o asalariados, ya no será tolerada; y como las masas de Haití (el primer pueblo esclavizado en derrocar con éxito la esclavitud), los revolucionarios liderarán el camino de toda la humanidad hacia una sociedad igualitaria llamada comunismo. Entonces, los trabajadores de todo el mundo estarán armados para luchar contra el sistema capitalista y sus lacayos: políticos, medios de comunicación, bandas y jefes. Estamos hombro con hombro con los migrantes de todo el mundo: trabajadores del mundo, uníos, ¡no tenemos nada que perder excepto nuestras cadenas!J